Capítulo diecinueve

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Narra Genevieve.

Mi piel expuesta en este ajustado vestido me hace sentir una especie de sensación nerviosa y mi respiración lo capta, haciendo que mis latidos sean inestables. Es desesperante tener que cumplir los deberes con esto puesto, y más, que voy solo por una maldita firma del enfermo de Silver, como si valiera tanto la pena darle importancia, me causa picazón en el cuello tan solo pensarlo.

También no dejó a un lado el hecho de que Marco estará, no dejo de pensar en las palabras que puedo decirle o el daño que pueda causarle, pero tenerlo cerca puede que afecte todo el plan, y no puedo dejar que eso pase, estamos a un paso de acabar con él.

— Estás muy pensativa Gen — la voz tierna de Olivia suena por mis hombros — ¿qué ocurre?

La chica se encontraba maquillando partes de mi piel dónde aún se encontraban pequeñas marcas en un esquema de colores entre verde y amarillo, le había pedido de favor que las cubriera bien antes de que Kim viniera a la oficina, la noche anterior me había quedado aquí, a repasar el plan una y otra vez, en caso de que haya una revuelta, Kim también se había quedado conmigo, al igual que Ian, él iba a dirigir a sus hombres, así que, dormimos en mi oficina, como si fuéramos un equipo muy unido.

— No es nada — le contesto con el mismo timbre de voz evadiendo mis pensamientos — solo que, no dejo de imaginar las cosas que puedan pasar, y sí este vestido no me va a estorbar a la hora de correr — doy un par de pasos dejando a Olivia de un lado, para llegar al espejo de pie, escudriño la imagen de una Genevieve qué he visto poca veces, veo como parte de la tela metálica cae sutil por mi pecho y se ajusta a mis ya casi inexistentes curvas, "mierda, he perdido mucho peso", una culpa se cuela por mi mente, es otra persona, esta es otra nueva Genevieve, pero, no deja de estar tan sucia y podrida por dentro, el hecho de vestir así no deja aún lado su pasado, mierda — ¿por qué tiene que estar tan descubierto este vestido? — digo irritada.

— Gen se te ve hermoso — declara. Sin pensar voy hacia el perchero y comienzo a buscar más modelos de vestidos, saco y aviento uno tras otro — Gen, no, espera — bufa al tomar los vestidos en el suelo — el que llevas es muy lindo, además ya te maquille, si escoges otro tendremos que comenzar de nuevo.

— Ya no quiero esto, es horrendo — un par de lágrimas se formaban en mis ojos — es horrible en mi cuerpo — la garganta me ardía con cada lagrima afuera — lo voy a ensuciar.

— Gen, ¿de qué hablas? — pregunta preocupada, no le hago caso, trato de buscar otro pero solo termino en el suelo con las demás prendas restantes, las lágrimas salen, ahora no puedo pararlas, no puedo evitar recordar los rostros de los hombres que abusaron de mí, sus manos en mi piel, en mis partes, como golpeaban y jalaban de mi cuerpo, era una muñeca de trapo bajo de ellos.

— Estoy tan sucia Olivia— no dejo de sollozar, el llanto ya se ha tranquilizado un poco, pero el pecho no deja de doler — Me tomaron tantas veces, era el juguete favorito de Marco, hasta que me jodio, y no hice nada para evitarlo — dejo salir un aliento pesado — Estoy tan jodida, Olivia, no merezco este vestido — sollozo un poco más — nadie debe merecer algo tan poco como esto — y me refiero a mi. Lloro de coraje, sé que nunca volveré a estar bien, pero debo sacar lo que tanto guardaba, sé que no merezco compasión menos viniendo de alguien que es un total desconocido para mí, ni siquiera pude desahogarme con Harry. — Lo siento, no quería... lamento que escucharas eso.

La chica se coloca en el suelo justo a mi lado, puedo ver el horror en sus ojos, toma de mis hombros y me atrapa en un abrazo, acepto su silencio, no hay nada mejor que esto, su abrazo habla por sí solo, al fin de cuentas ¿qué podrías decir después de una confesión como ésta? Twist se separa un poco para verme a los ojos, sonríe amargo pasando saliva, sus ojos están mojados, y no entendía la compasión qué sentía hacia mi, no tiene porque sentirlo, limpia mis mejillas, su tacto es tan suave que cierro mis ojos por unos instantes.

Crudo | Harry Styles |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora