Capítulo 31. El cristal dentro de mí

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Debo admitir que todo el vuelo de regreso me incomodó, no sólo por la escena con Damian, sino porque el ambiente se sentía muy raro, como si Asth y Damian estuvieran de mal humor o muy tensos, era difícil de explicar. Cuando llegamos devuelta a la ciudad fui la primera en bajar del dragón, no quería decirles nada a ellos, pero desde hace quince minutos me estaba haciendo del baño, sin embargo, por un breve minuto se me olvidó que el dragón estaba muy alto, así que cuando intenté bajar caí al suelo. Al instante Damian y Asth bajaron para ayudarme, ambos me tendieron la mano al mismo tiempo.

- ¿Te encuentras bien Mili?

- Sí, estoy bien – reí nerviosa tratando de ocultar mi vergüenza y me levanté sin la necesidad de tomar alguna de las dos manos que me ofrecían. Me sacudí el pantalón – Me adelantaré primero a la casa, sé cómo llegar

- No creo que sea buena idea, te acompañaré – dijo Damian

- ¡No! – sin querer grité demasiado fuerte, por lo que sorprendió a Damian – No, enserio, yo iré sola – Sin agregar nada más salí corriendo en dirección a la casa.

Después de salir del baño me percaté que no había nadie en la casa, se me hizo extraño porque según Asth, Aylin y Ban ya estaban aquí, y cuando llegué la puerta estaba abierta. Bajé hacia la sala y me senté a esperar a los demás. Damian y Asth no tardaron mucho en llegar.

- Dijiste que ellos ya estaban aquí – replicó Damian quién al llegar se dejó caer en el sofá individual que quedaba mirando frente al que yo estaba sentada

- Y no era mentira, tal vez tuvieron que ir a otro lado. Les enviaré una carta avisándoles que ya están aquí

Asth salió dejándonos a solas a Damian y a mí, de la vergüenza que sentía no pude ni siquiera mirarlo, es más no podía decir ni una palabra, Damian me hacía algunas preguntas pero yo a lo mucho respondía con un sí y un no. Aunque Asth no tardó ni cinco minutos, para mí fue una eternidad, cuando él volvió sentí que pude respirar mejor o al menos ese fue al principio. Asth se sentó en el sofá grande, y como si leyera mi mente me daba miradas llenas de preguntas, sus miradas iban de Damian a mí y viceversa.

- ¡Hola! ¿Encontraron algo?

- ¡Aylin! – Me levanté corriendo cuando la vi entrar, estaba aliviada que ella llegara a salvarme de la gran incomodidad

Aylin y Ban dieron su informe de lo que estaba pasando en la facción, al parecer el líder junto con otros lograron dar con uno de los campamentos de la rebelión e incluso capturaron a unos cuantos rebeldes, Aylin dijo que cuando ellos llegaron la facción estaba casi desierta, la mayoría habían sido mandados a seguir los rastros de la rebelión mientras que otros inspeccionaban a fondo el campamento, en cuanto al líder se encontraba muy ocupado interrogando al rebelde. Me preguntaba si aquí eran pacíficos, o si al igual que en las películas ahora mismo los estaban torturando para que hablaran, pensar la segunda opción me heló la sangre. En fin, gracias a eso fue muy fácil para ellos buscar información sobre el ópalo en el archivo confidencial.

- No creo que haya sido tan fácil a acceder a esos documentos, solo los altos mandos pueden hacerlo

- Ser de la realeza tiene sus ventajas, después de todo no creo que la facción quiera verse envuelta en una guerra con los hijos del mar también

No tenía idea de qué tanta influencia tenía Aylin hasta ahora, sabía que ella era la que dirigía a este grupo, pero ahora sabía que ella era una princesa, literalmente. Ella era hija de los reyes del mar del sur de Ashkaly, sus padres murieron cuando valientemente combatían contra la rebelión, así que ella quedó como sucesora del trono por ser la única hija, sin embargo ella consideraba que su pueblo no necesitaba una reina, necesitaba de alguien que los protegiera contra cualquier peligro. Y en ese entonces había innumerables bajas en su ejército, y ella siendo joven aún no tenía la capacidad de armar uno nuevo. Así que a sus dieciocho años negoció con el líder de la facción, la protección de su pueblo a cambio de su lealtad. Sin embargo la facción no necesitaba lealtad, necesitaba guerreros, así que por primera vez en miles de años se reclutaron a sirenas y tritones, al inicio su pueblo no estaba de acuerdo, pero Aylin para mostrarles qué tan decidida estaba, también se enlistó.

- ¿Y qué decían?

- Pues no decían la gran cosa, solo que en una misión de hace años encontraron enterrado ese ópalo. No tienen idea cómo llegó o para qué sirve, hay varias especulaciones, entre ellas dicen que el ópalo es la fuente de la vida y de energía de todo Ashkaly, por lo que puede que haya más escondidos, en sí el ópalo no hace nada más que brillar, pero lo resguardan porque consideran que si en verdad es la fuente de energía de Ashkaly, si se llegase a destruir o dañar puede haber una catástrofe. Y bueno también ahí fue cuando leímos que habían atrapado a unos cuantos rebeldes. Ban y yo estuvimos ahí un buen rato buscando algo más, pero no hay nada importante o algo que nos diga qué fue lo que pasó con ustedes cuando fueron absorbidos por el portal

- Sobre eso, creo que fui yo – dije y todos me miraron, incluso Damian, quien no sabía qué era lo que había descubierto cuando fuimos con la sacerdotisa

- ¿Entonces si descubrieron algo? ¿Si eres una elemental?

- ¿Elemental? – Asth preguntó incrédulo

- Sí, al parecer mi madre era una elemental del aire – la verdad no sabía cómo decirles que en realidad estaba muerta, y que lo que hacía que estuviera respirando era un cristal en mi pecho. Traté de explicarles con detalle lo poco que vi cuando me sumergí en la laguna, y les expliqué que todo eso en realidad eran recuerdos de mi madre más que los míos, entre más les contaba parecían asombrados y en ocasiones incrédulos – Así que en teoría los ópalos dan energía, sobre todo para abrir portales a otras dimensiones, no sé si sean curativos o no, pero la sacerdotisa me revivió con un pedazo de él, es por eso que desde que era pequeña podía abrir portales

- Eso explica por qué se abrió el portal cuando encontraron el ópalo de la facción. Es como si los ópalos se reconocieran, como si aclamaran por ese fragmento que hay en ti

- ¿Nunca habías escuchado sobre eso en el mar? – preguntó Asth

- No, nunca había escuchado sobre los ópalos. Tal vez mis padres, pero no pudieron decírmelo, supongo que no esperaban morir antes de revelarme ciertas cosas

- Eso quiere decir que tú puedes terminar con esta guerra – Ahora todos miramos a Ban, quien no había pronunciado ni una palabra hasta ahora – Si eres capaz de controlar el poder del cristal dentro de ti, creo que podrás acabar con esto

- Ban tiene razón Mili, ahora que sabemos la verdad sobre ti podemos ayudarte a controlar y a pulir tus poderes tanto como elemental, como los del cristal. Además dices que es cuestión de tiempo para que más recuerdos lleguen a ti, no sabemos pero puede que tus padres hayan visto el rostro de Zeeshan

- ¿Se refieren a que entre al campo de entrenamiento? Es una humana, no aguantará

- No la dejaremos sola. Además tendrá al mejor entrenador – Aylin miró a Asth cuando dijo esto último

- ¿Entrenamiento? ¿Como entrenamiento militar? – pregunté rezando que me dijeran que no, pero fue lo contrario – Me llevará años aprender a usar mis poderes, solo los usé una vez y fue cuando estaba desesperada por temor a que ese kitsune nos matara. Además no tenemos el tiempo suficiente, Zeeshan puede volver a atacar, incluso más pronto de lo que pensamos, no creo que se quede de brazos cruzados cuando parte de sus guerreros están atrapados en la facción

- Tú no lo conoces, es alguien sin corazón, para él perder a unas cuantas personas no significa nada. Él no se arriesgaría por salvarlos, sus vidas no le interesan, para él solo son peones en su juego. Sin embargo, en el campamento encontraron mapas con ubicaciones, a estas alturas Zeeshan ya debe saber que la facción envió a unos cuantos para allá, debe estar apurado reubicando a su ejército y puede ser posible que no le dé tiempo, así que tendrá bajas que le llevará algún tiempo recuperar, es por eso que debemos aprovechar ese tiempo y entrenarte lo mejor que podamos. Y como lo dije no te dejaremos sola, todos podemos ayudarte en alguna forma

- Espero y tengamos el tiempo suficiente

- Lo tendremos. Empaquen sus cosas, mañana iremos a Yiaxus 

ASHKALY: en búsqueda de la verdadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora