1

3K 135 532
                                    

rodrigo pov

nada, estaba ordenando la conchuda habitación de huéspedes porque venia el hermano de mi vieja visitarnos y claro, como estoy todo el día rascandome los huevos me saque la lotería con la ordenada de pieza.

—hijito, ¿ya terminaste la pieza?— dijo mi mamá desde la cocina

—¡no!— grite, en realidad ya la había terminado, estaba acostado encima de la cama pero si decía que si la había terminado, me asignarán a hacer otra cosa

—¡bueno apúrate!—

me quede viendo mi teléfono cuando escuche un auto llegar, bajé hacia el ventanal del departamento que daba a la calle y lo que escuché no fue un auto, fue una camioneta, con un hombre bajando, más bueno que la puta madre.

pelinegro, alto de unos 1.80, el labio de arriba más pequeño que el de abajo, me miró y me sonrió, en cambio yo me puse rojo y subí hacia arriba, luego escuché el timbre.

mamá abrió la puerta y escuché que entró aquel hombre

—RODRIGOOOOO!!— llamó mi mamá —VENI A SALUDAR A TU TÍO— baje y el caso es que lo vi ahí, parado con dos valijas, lo miré de arriba para abajo, ¿viene a quedarse dos meses o que mierda?

—je, hola...tío—

pov iván

estaba observándolo, había cambiado, bueno no había crecido mucho, pero seguía siendo el mismo tierno de siempre, tan lindo, pelo revuelto, labios más grandes, dulce, ¿seguira siendo el mimo inocente de siempre? ay, eso sonó jodidamente enfermo, no debo pensar en eso, no me incumbe.

—joo, estás re grande rodri— lo abrace y sentí como él me devolvió el abrazo —che bueno llévame a donde voy a dormi—

el día pasó rápido, ya era la hora de la noche y no podía conciliar el maldito sueño, vi mi teléfono y la hora marcaba las 3:36.

—pero la puta madre....— susurre y escuché pasar a alguien por el pasillo hacia la cocina, era rodrigo, ¿me sentía enfermo por mirar? no. mirar no es pecado, bueno rodrigo es el sinónimo de PECADO.

espere unos minutos y entré a la cocina

—¿que hacés despierto a esta hora rodri?— se ve que le asuste, porque hizo un pequeño saltito, lo observé denuevo, pelo pegado a la frente, mejillas sonrosadas, ojos brillantes pero no como para haber estado llorando.

—uhm.. tío... me dio sed... usted?— me respondió

me reí —no me trates de usted, decime iván tranqui— le sonreí — y en parte tenia sed y en otra no podía dormir—

— ¿pesadillas? — rodrigo se fue soltando poco a poco

—algo así— respondi, mire denuevo a rodrigo, su camiseta de gatitos le quedaba un poco grande, eso hacía que se vieran sus clavículas, dios

—¿tio? ¿tengo algo? — se miró a si mismo

—no— mire hacia otro lado un poco avergonzado, tener cerca a rodrigo me está matando, los pensamientos no me están ayudando para nada— che la última vez que te vi estabas más alto— cambié de tema

— eyyyy que malo que sos tío — fingió que lloraba — la última vez que lo vi estaba más joven—

—te zarpaste— reí —que onda rodrigo contame mas de vos..ya no hablamos solos, ya no sé nada de vos, antes me contabas todo, ¿es por tus estudios? —

Tio (RODRIVAN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora