Fionna y Cake salieron de aventura para atrapar a la Reina Dulce. Era el momento perfecto para estar a solas con Simon. Además, acababa de comenzar una tormenta de nieve.
Lo buscó en su habitación, pero no lo encontró en ningún lugar. Suspiró. ¿Tal vez fue a ver su reino? Se acercó a un ventanal en el cuarto de Simon y vio una manta muy grande en él.
Se acercó lentamente y pudo ver que Simon estaba hecho un ovillo, dentro de una especie de nido de calor y cosas suaves, estaba durmiendo.
Movió su mano hacia Simon y lo sacudió lentamente.
¡Mm! - el Rey Invernal suspiró. ¿Acaso Simon estaba tratando de invernar? Los humanos no hacen eso. Tal vez el frío era demasiado. Después de todo, Fionna usaba abrigos y Cake había terminado usando botas para las almohadillas de sus patitas.
Si tan solo Simon pudiera usar la fuerza de su corona... tenía que ayudarlo, pero primero necesitaba encontrar un recipiente. Crearía un ser en su laboratorio, una perla sin movimiento ni mente, para no repetir el error que tuvo con la Reina Dulce. Pero tendría que convencer a Simon de esto, abandonar la locura de la corona era algo difícil.
¿Rey Invernal? - Oh, su príncipe está despierto.
¡Oh, Simon! Solo estaba recordando lo delicada que es la temperatura humana - Simon se sonrojó. ¿Le había dicho delicado?
Sí... los humanos - Simon sonrió débilmente. Acababa de despertar y se sentía un poco adormilado. Aún no confiaba mucho en el Rey Invernal; algo tramaba, pero también parecía un buen tipo. Después de todo, Marceline amaba tanto a Marceline como él, eso lo hacía perfecto. Marceline era su hija, y él era su padre. Su príncipe ocuparía tan perfectamente el lugar de madre.
Simon... ¿Mamá? Oh dios, tuvo que apretar su puño contra su muslo para reprimir el deseo de lanzarse ahora mismo contra el humano.
¡Simon!... - Marceline corrió hacia el humano. Simon la levantó en sus brazos, con amor, aunque la niña tenía un cuerpo de hielo y podría quemar con demasiado contacto, si es Marceline realmente no le importaba.
Hola, Marci - Simon dejó un beso en la cabeza de la niña, y el Rey Invernal con una sonrisa se sintió un poco de envidia, pero bueno, era Marceline.
¡Gracias, papá! Vamos, Simon, te mostraré mi nuevo solo. - Marceline se bajó de los brazos del científico, que se sorprendió ante el título que Marceline le dio al Rey Invernal. Pero no tuvo tiempo de preguntar, porque ahora estaba sentado en un sofá con Marceline tocando su guitarra con una sonrisa.
Ella toca muy bien - El Rey Helado se sentó en el apoyabrazos del sofá y pasó su mano hasta el hombro de Simon, haciéndolo apoyarse en él. Simon se puso nervioso. ¿El Rey Invernal no era muy cariñoso?
S-sí, ella es la mejor - Ante estas palabras de Simon, Marceline se emocionó aún más.
¡Papá tenía razón! ¡Él es la mejor mamá! - El Rey Invernal se atragantó. ¡Atrapado!
¿Mamá? - El calor en las mejillas de Simon brillaba tanto. El Rey Invernal se quedó con cara de estúpido mirando, pero reaccionó. ¡Necesitaba una mentira!
Oh, sí, Marceline. Tú sigue practicando, tengo que hablar con... Simon - Marceline asintió, y el Rey Invernal tomó la mano de Simon. Cuando estuvieron solos, Simon le quitó su mano y cruzó sus brazos sobre su pecho.
¿Una explicación? - Simon no parecía muy feliz.
Bueno, Marceline me preguntó qué era porque... porque eres como yo, pero humano, y, bueno, como yo soy su papá, Marceline pensó que tú eras mamá - Simon lo pensó un poco. Bueno, eso podía ser posible en la mente de un niño.
Oh, bueno... sí, tal vez deberías explicarle que no puedo ser su mamá - Simon se tocó la nuca con la mano.
Oh... pero eso le rompería el corazón - Simon dobló sus labios. No quería hacerle eso a Marceline.
Pero... soy un hombre - Simon se tomó el brazo y el Rey Invernal lo volvió a tomar del hombro con cuidado, acercando sus cuerpos.
Oh, pero ser llamado mamá no te quita que seas hombre. Solo es un título, como uno de los padres de Marceline - Simon sintió que su corazón se calentaba. Dentro de él siempre esperó ser el cuidador de Marceline. ¿El título de mamá no sonaba tan mal?
Bien... pero en algún momento tengo que volver a mi mundo. Tú te encargarás de eso - Y Simon se fue en un conflicto interno, mientras el Rey Invernal caminaba serio hacia su laboratorio.
Oh... mi príncipe, ¿irte? No lo creo... eres mío, te llevaré con amor, lujos y más... - El Rey Invernal miró por la ventana el regreso de las amigas de Simon, siendo alabadas por su pueblo helado. - Tus amigas ya se acostumbraron, y si ellas no quieren irse... ¿por qué lo harías tú?
El Rey Invernal comenzó a mover unos aparatos de hielo.
Comenzaré pronto con los experimentos. Tu perla estará lista, y entonces, cuando seas apto para mi mundo, cuando tu cuerpo débil pueda soportarme... serás mío, mi príncipe - El Rey Invernal sonrió para sí mismo.
Mientras Simon caminaba por el castillo, se encontró con Fionna y Cake, que volvían de su misión victoriosos.
¡Oye, eso fue genial! - Cake se lanzó hacia Simon para abrazarlo.
¡Sí, jaja, Simon debería venir con nosotros la próxima vez! Acabamos con unos esqueletos, y conseguí esto. ¿No es genial? - Fionna le mostró una espada de hueso.
Oh, Fionna, siempre coleccionando espadas - Fionna y Cake rieron mientras se encaminaban a su árbol con Simon.
¿Cómo te va con el Rey Invernal? - Fionna sonrió. Había pasado tiempo desde que Simon estaba tan emocional.
Yo digo que se besen - Simon se atragantó ante las palabras de Cake. ¿Besarse con el Rey Invernal? Eso... no sonaba mal.
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❄️El rey quiere un principe ❄️[TERMINADA][corregido]
Fanfiction{SISTEMA DE MARCAS ALMAS GEMELAS} Simón, Fionna y Cake terminan por error en el reino de winter king, está asustado, ¡más cuando esté rey se abalanza sobre el!