⚠️Possessive Omega⚠️ - Barco & Zeballos [Omegaverse]

Capítulo 1: Superclásico, el comienzo de todo.

Hace un año que la vida de Exequiel había cambiado completamente.

Empezando por lo sucedido en el partido contra Agropecuario, en agosto del 2022, cuando lo lesionaron.

Él es consciente de que Milton le fue a pedir perdón, pero algo en su interior se lo impedía, ¿Cómo hacías para perdonar a la persona que lo sacó de la cancha por más de seis meses?

Sabe que el Alfa no lo hizo apropósito, pero los comentarios por parte de los periodistas lograron angustiarlo y dudar de todo.

Sólo quería jugar y era algo que, por unos largos, meses no podía hacer.

Por el lado amoroso iba de diez; tenía un Alfa que lo acompañaba en todo momento.

Cuando decidieron dar un paso más en su relación, y el Alfa lo marcó fue la mejor decisión que pudo tomar en su vida.

Luis fue su mayor pilar en cada momento de la recuperación, y lo consentía constantemente.

Pero, sin dudas, había algo que le dolía más que nada… El ser, prácticamente, infértil.

Él más que nadie sabía la ilusión que tenía Luis con ser papá.

Como se emocionaba cada vez que no le llegaba su celo y creía estar en cinta y a la hora de hacerse un test, le daba negativo.

Amaba ver cómo su Alfa era tan unido a su hermanito pequeño, Máximo, era tan lindo verlos juntos. El como lo mimaba y lo cuidaba, sabía que el mayor sería un gran papá.

Y él más que nadie, quería a Luis como el papá de sus cachorros.

Se sentía tan inútil, le dolía demasiado el no poder cumplirle el sueño a su Alfa, no después de todo lo que el mayor hacía por él.

Por otro lado, en una situación muy diferente, se encontraba Valentín.

El menor estaba en el auge de su carrera.

Si bien, la Selección sub 20 fue eliminada en Octavos, dejaron una buena impresión en la hinchada. Todos veían la garra que tenían los chicos a la hora de jugar.

Ni hablar que estaba con el Alfa soñado de cualquier Omega.

Agustín era el Alfa más tierno, cariñoso, amable y atento que podía existir.

Y lo que más amaba es que era SU ALFA y de nadie más.

Pero ahora mismo, luego de la derrota contra River, no quería ver a nadie.

La bronca, la ira y el enojo se habían apoderado completamente de su cuerpo.

Quería encontrar una forma de descargar todo pensamiento negativo, pero no sabía cómo.

Hasta que lo vió… El Omega que lo volvía completamente loco desde el primer momento en el que lo vió.

Y ahí se dió cuenta que él le sería de muy gran ayuda.

Exequiel sintió como lo agarraron del brazo y lo encerraron junto a otra persona. Cuando iba a pegar un grito, le taparon la boca, impidiéndoselo.

— Ni se te ocurra gritar — Le dicen.

— Val, eras vos — Suspira aliviado  — Me asustaste — Lleva una mano a su pecho, respirando agitadamente por el susto.

— Cállate. — Lo reta Valentín.

— ¿Qué te pasa, nene? — El Chango le pregunta preocupado y confundido por su actitud.

— No me digas así — Gruñe molesto.