Cap 17

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Miraba como escapatoria la ventana del tercer piso, las clases de historia le atraian pero estaba muy cansada. Habia pasado una semana desde el acontecimiento, no se habia transformado desde ese dia. Trato de llevar su rutina pero se quedaba dormida en las bancas y sillas.

Se escucho el golpe en la puerta, la profesora detuvo su entretenido relato sobre la revolucion de los trolls. En la puerta se encontraba la jefa de Gryffindor, poso su mirada en la peliblanco.

-De acuerdo subdirectora, Rellish te doy permiso de retirarte- en esa clase la compartian con Hufflepuff, la miraban con curiosidad. Snape estaba hasta atras, inusual en el.

Salio y la profesora McGonagall la guio hasta su salon. Cerro la Puerta con llave , comenzo a analizar el estado de la joven.

-Lamento que no haya funcionado, debi cometer un error- su mirada era de lamentacion -Podemos buscar en la biblioteca e incluso escribir a mis amigos-

-Profesora esta bien-

-¡Claro que no! - se enfrento a la chica, en sus ojos habia un fuego-Te vi luchar por ganarte esto, usted es muy inusual Rellish, se que rendirse no esta en su vocabulario- trataba de hacerla sentir mejor. -Su tía enserio fue una gran tutora, solo mire lo que ha logrado-

No podia creer que esa mujer, que infundaba respeto la mirara asi, sonrio, la profesora camenzaba a llenar el salon con mas palabras de angustia que no pude esperar. Eris se transformo, por el movimiento ella paro su parloteo y casi se cae de la impresion.

-¡Dios mio! - tenia los ojos muy abiertos, un lobo grande la miraba atentamente, Rellish sabia que la profesora estaba asustada y muy impresionada. Bajo su cuerpo hasta tocar el suelo, entre sus patas coloco su cabeza.

-Señorita Rellish realmente es usted- Minerva no podia apartar la mirada del lobo. Con cuidado se acerco hasta posar su mano en el suave pelaje. -Es hermoso- Rellish volvio a cambiar y rapidamente estaba entre los brazos de la subdirectora.

-Gracias por darme la libertad- no dijeron nada más.

Saboreo el delicioso sabor del triunfo, comenzaba a trasar su propio destino. Probo y ahora ya no queria parar, sabia que era hora de su proxima clase. Se separo con delicadeza de la dama, le sonrio y camino perdiendose en los pasillos.

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