De Nadie Más...

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Draco no entendía porque su relación Harry había terminado, Harry solamente se fue alejando y un día le dijo que su relación ya tenía un futuro y que lo lamentaba pero que no podía quedarse en una relación como la que ellos tenían.

Realmente no lo entendía, ¿Qué había hecho mal?, era porque realmente no pudo dejar en el pasado el hecho de que fue marcado como Mortífago o porque Draco no era lo suficientemente bueno para estar con el niño dorado del mundo mágico, Harry ya no pudo con los constantes  artículos del Profeta acerca de como el Elegido se había enganchado por una ramera Mortífago, si Malfoy hijo había hecho uso de las artes oscuras o de amortentia para amarrarlo o nunca supero su amorío con la chica Weasley, y obtuvo su respuesta una semana después cuando fue al callejón Diagon por suministros para sus pociones, los vio saliendo de la Heladería Florean Fortescue, iban agarrados de las manos compartiendo un helado, en los últimos dos meses Draco ya no había visto esa sonrisa en Harry siempre eran resoplidos, el contacto al mínimo y siempre llegaba tarde, tal vez su ruptura fue un poco de todo pero verlo con la chica comadreja cuando le había prometido que ya no había nada entre ellos, le desgarro el corazón, hubiera preferido que le dijera antes que ya no lo quería en lugar de que lo engañara y lo olvidara en tan solo una semana.

El mundo mágico estaba encantado de que finalmente el chico dorado haya dejado su relación con la escoria mortífaga y regresara por el camino del bien con una gran pareja como lo es una héroe de guerra como Ginevra Weasley, Harry lo vio pero fue una mirada indiferente, afianzo su agarre en la mano de la comadreja y se la llevo por otro camino.

Después de ese encuentro se mantuvo escondido en su departamento, no quería escuchar que la hermosa pareja Potter-Weasley iban a tener un gran futuro y que serían una hermosa familia en el futuro, habían pasado un mes desde su ruptura, aun tenia algunas cosas de Harry, las había colocado en una caja por si un día se dignaba ir por ellas o cobardemente mandaría a alguien por ellas, estaba a un día de tirarlas a la basura cuando llamaron a su puerta, no muchos lo visitaba solo su madre, Pansy y ocasionalmente Neville, con el ultimo había creado una amistad que no se esperaba, su unión fue la herbología, se había disculpado con él por todo el daño que le había ocasionado de niños, Neville acepto su disculpa y de ahí había nacido su amistad. 

Harry nunca fue por sus cosas, se odia por esperar cada día a que se dignara a recogerlas, no se sentía bien, estaba adelgazando, ninguna comida duraba mucho en su estomago y su magia estaba fluctuando demasiado, odiaba sentirse así por una persona a quien no le importaba a pesar de los años que habían estado juntos, odiaba a Harry por haberlo dejado y haberle sido infiel, porque si, lo fue, como pudo haber entrado en una relación en una semana después de haber roto una relación de seis años, odiaba a Ginevra por haberle arrebatado a Harry, ella sabia que estaban en una relación, siempre que iban a la madriguera se le seguía insinuando, Harry siempre la hacia a un lado pero al parecer sus esfuerzo habían dado resultado y a quien más odiaba era a el mismo, por seguir esperando por un idiota como Harry, por más que lo intentara no podía olvidarlo y el que se sintiera mal no lo hacía más fácil.



....



Draco nunca sabrá que le paso ese día, ¿se arrepentía de lo que había venido después? no lo sabe muy bien, ya estaba hecho, ya no había vuelta atrás, pero no podía dar marcha atrás, tenia algo, más bien a alguien por quien vivir, no estaba en sus planes pero había pasado.

Después del fiasco de su relación con Harry habían pasado dos meses Neville (el único que aun le hablaba) lo invito a su fiesta de compromiso con Hannah Abbott, sabía que se iba a encontrar con Harry y su nueva pareja, no quería ir pero no quería ser descortés con Neville, la única persona que seguía en contacto con él a pesar de ya no ser parte del circulo de amigos de Harry, y ahí estaba, en el bar que tenía junto con Hannah, lo había cerrado para que todo fuera entre amigos y conocidos, Draco había respirado tranquilo porque no vio por ahí una cabeza con un trapeador encima, ya habían pasado dos horas, y no había aparecido el gran Harry Potter, eran cerca de las 11:00 de la noche cuando salió de la red floo estrepitosamente, parecía borracho pero ya no era de su incumbencia aunque quisiera, había llegado solo, sin su novia pelirroja, Draco iba a quedarse 20 minutos más y luego se iría a despedir de Neville, su salud no había mejorado, ya no se le revolvía el estomago pero su magia estaba debilitada y bueno al menos ya podía comer un poco más, pero no entendía porque su vientre estaba más hinchado, no mucho pero se veía un poco.

De nadie  más - HarcoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora