Canto II: SOBERBIA.

31 11 8
                                    

En la cumbre de la vida, erguida y altanera,

la soberbia se alza, feroz y traicionera,

como tormenta oscura, nublando el corazón,

engañando al orgullo en su fútil canción.

Se yergue como un titán, creyendo ser la reina,

ignorando que la humildad es el camino de la ley,

mas su sombra acecha, su venganza es cruel,

como relámpagos de fuego, devora lo que es fiel.

En su trono de ilusiones, el soberbio se envanece,

sin darse cuenta de que su alma padece,

sus amigos se alejan, su amor se desvanece,

y en la soledad amarga su ego perece.

La soberbia es el abismo donde caen los valientes,

pues olvida que somos polvo en el viento, seres conscientes,

la tormenta que desata es su propia perdición,

pues en su torre de vanidad, hallará la desolación.

Así que mortales, aprendan la lección que nos brinda la vida,

que la soberbia los sume en una guerra perdida,

cultiven la humildad como antorcha y guía,

para evitar que la tormenta de la soberbia los guíe al frío y la agonía.

Como ciertamente a mí me ha pasado,

A pesar de que me arrepienta de haberlo hecho,

No hay vuelta atrás ahora,

Y hundida en el mar de la soberbia yo me he ahogado.

👿MIS TORMENTOSOS PECADOS.👿Donde viven las historias. Descúbrelo ahora