9: ¿Felicidades? Ni tanto

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Capitulo 9

Diciembre siguió su curso, y termino con broche de oro; año nuevo. Fiesta y alegría. Ellos solían viajar horas para terminar en casa de la abuela, que había tenido ocho hijos, que habían tenido aún más hijos. No era una fiesta familiar porque incluso los vecinos se unían. Todo era gritos y música a todo volumen, ella se encerraba en una habitación toda la noche y las personas ya sabían que no debían molestarla, excepto una; su hermano. Pero él también estaba muy ocupado celebrando. Con su cuaderno entre manos ojeo someramente cada página que había ocupado aquel año, haciendo un repaso de cada desahogó se reafirmo así misma que no tenía razones para celebrar. El cuaderno quedó abierto en una de sus reflexiones más recientes...

Daniela Parra es otro ser sin personalidad, observó como sus amigos molestaban a su hermano mellizo con su peor miedo y lo único que hizo por ayudarlo, fue huir. Es una cobarde, una...

Ly había quedado particularmente frustrada luego de aquel incidente, y se había enojado de sobremanera con Dani por haber tomado una postura tan neutra mientras su hermano estaba siendo molestado ¡Ella estaba allí! Al lado de Kimberly, Siena, Camila y compañía, y lo único que al final hizo fue arrastrarlos hasta el auto después de que ella había empapado al grupo de chicos.  Pues bien, se había ganado merecidamente un lugar en su cuaderno junto a sus amigas. A las diez de la noche se colocó unos audífonos y se fue a dormir.

Y antes de darse cuenta y siendo inevitable, los días pasaron, las vacaciones terminaron y comenzó otro año escolar.

—¡Felicidades, su historia fue la elegida para representarla este verano por el club de teatro! –Exclamó la profesora Marcela, completamente emocionada.

Dan y Ly se quedaron mudos, a penas procesando lo que dijo la señora de cabello rojizo.

—¡Yo lo sabía! –Soltó la mujer, se levantó de su asiento con con una alegría jocosa– ¡Lo sabía! Sabía que ustedes harían un trabajo excelente. Todos fueron muy buenos trabajos, pero el de ustedes tiene algo especial.

Ambos lejos de sentirse halagados, se preguntaron que de especial podría tener ese guión, ninguno lo llamaría una gran obra literaria.

—¿Significa que los del grupo de teatro van a actuar nuestra obra? –Pregunto Ly, al fin.

—¡Sí, linda! ¿No es increíble? Y no solo es el grupo de teatro, también el grupo de arte para el escenario, y siempre nos acompañan también los de música. Y por supuesto también ustedes los de...

La chica le interrumpió inmediatamente.

—No estoy interesada en el teatro –Zanjo– Si quisiera actuar me hubiera inscrito allí –Miro a su compañero– Y la verdad, creo que tampoco Dan está interesado.

Daniel nego. No, no estaba interesado. El ánimo de la profesora bajo un poco, solo lo suficiente para mantener una conversación que no agobiara a Ly con su efusividad.

—Lo malinterpretaste linda, ustedes serán algo así cómo nuestros directores –Explico– ¿Quienes mejores para captar la escencia de esta historia, sino los dos que la escribieron?

—No –Nego– Eso no es parte de la calificación, no me interesa pasar más tiempo del necesario en esta escuela solo para hacer una –arrugó la nariz he hizo una mueca– obra de teatro.

La mujer asintió, insistiendo en no sentirse ofendida por aquella expresión. Con un tono más conciliador dijo;

—Hablando de tus calificaciones, linda, se que apenas estamos empezando el segundo trimestre pero deberías saber que estar en estás actividades siempre afectará en tus notas, en un buen sentido claro. Trabajar con el club de teatro podría ayudarte con tus materias más bajas. Igualmente a ti Daniel.

GraciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora