La tormenta y la calma.

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Senku recuerda que, cuando murieron sus padres, él no sintió el impulso de llorar. Recuerda que sintió rabia, que sintió tristeza, que sintió confusión, sin embargo en ningún momento había llegado a llorar.

"Está muy pequeño. El no entiende." Repetían los adultos a su alrededor. Pero él si lo entendía a pesar de ser solo un niño, entendía que era la muerte y entendía que sus padres nunca iban a regresar, simplemente nunca llegó a derramar lágrimas por ellos.

Mucho años después, cuando Byakuya se embarcó en su aventura espacial, a pesar de tener ese temor en el pecho y ese sentimiento que no lograba explicar, aunque sabía que su padre se iba a ir durante bastante tiempo y que era una misión peligrosa, tampoco lloró.

Por mucho tiempo había pensado que simplemente él era inmune a las lágrimas y por eso casi nunca las había derramado, pero esto no era así, no es que no pudiese llorar por la pérdida de sus padres, simplemente es que se había estado reprimiendo por muchísimos años.

Hasta que estalló, hasta que no pudo aguantarlo más.

Todo lo que no lloró de niño y de adolescente, lo estaba llorando en ese instante.

Cuando su crisis se desató, Ryusui actuó primero. Lo había acunado en un cuidadoso abrazo, como temiendo que pudiese romperse más, sintiendo los ojos picarle por la culpa. Senku solo se dejó hacer mientras que sostenía con cuidado la ropa del capitán. Nanami se intentó disculpar de veinte formas distintas, los demás (Ukyo) lo habían mandado a callar otras cinco, y se lo habían intentado quitar un par de veces, pero el rubio se negaba a soltar al científico hasta que este estuviese completamente bien.

Los demás no se habían mantenido al margen tampoco. No es que pudiesen de repente hacer que el chico se sintiese menos miserable, pero si podían estar a su lado dándole un poco de consuelo y apoyo para que no se sintiera solo. Nunca más se iba a sentir solo.

Chrome había abrazado a Ishigami por la espalda mientras que Ukyo y Tsukasa se encontraban uno a cada lado del científico, acariciandole el cabello o dándole palmadas en la espalda, cualquier cosa que pudiese transmitir que ellos estaban con él. Gen por su parte se encontraba detrás de Ryusui, encargándose de secar las lágrimas que derramaban aquellos ojos color rubí.

Senku, quien era arisco con las personas, en aquel instante se dio cuenta de lo mucho que podía necesitar un simple abrazo. Nunca volvería a negarse a uno.

El tiempo pareció abstracto en aquella habitación, sentían que habían pasado horas cuando en realidad no había llegado a pasar ni una completa, a duras penas el sol apenas comenzaba a plantarse en el firmamento.

No puedo decir que Senku después de un rato por fin se había tranquilizado puesto que era imposible que un colapso de esa magnitud simplemente desapareciese y que de repente se encontrara bien, no, sin embargo si puedo decir que había dejado de sollozar y de hipar de forma excesiva, aunque de vez en cuando un par de lágrimas nuevas abandonaban sus ojos.

Estaba obsorto en sus pensamientos, tanto así que mantenía los ojos cerrados. Repetía esas escenas olvidadas una y otra vez en su cabeza, intentando fijarse hasta en el mínimo detalle.

Puede que fueran traumas, pueden que le causaran dolor, pero no iba a ignorar más esos momentos. Aquellos recuerdos eran importantes para él, ya sea para bien o para mal, eran importantes. Habían marcado su vida, y, en lugar de temerles, tenía que aceptarlos; en lugar de que fuesen algo negativo, tenía que volverlos algo positivo.

Tenía que sanar, y para eso no podía seguir cubriendo esos recuerdos con una manta en lo más profundo de su mente.

En cierto punto dejó de tener control sobre sus pensamientos y su mente comenzó a divagar en cosas que no tenían nada que ver, fue ahí cuando se dio cuenta de que se estaba quedando dormido con su cabeza apoyada en el hombro de Ryusui y entre esa maraña de manos que lo abrazaban o consolaban. Estuvo tentado a dejarse guiar por el sueño, estaba cansado por el desgaste emocional y se sentía mal tanto emocionalmente como físicamente. Al final decidió que lo mejor sería abrir los ojos y alejarse de los brazos de Morfeo, sabía que no se iba a sentir mejor hasta que hablara y no quería dejar esa charla para mañana.

Apostar Y Perder.  ♡Dr. Stone. SenkuHarem♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora