Pretty please - JACEGON

Put my mind at ease

Mierda, creo que me merezco un descanso.

Ese era el único pensamiento que rondaba la mente del peli-castaño, luego de tres largas y agotadoras semanas llenas de trabajo.

--Traes cara de muerto. -la voz burlona de su novio se escuchó en la habitación.- Te dije que no te sobre esfuerces, vas a terminar inconsciente uno de estos días.

--Egg, por favor, no empieces, justo ahora estoy lleno de estrés. -la voz del castaño salió en casi un susurro.- No voy a poder responderte como se debe.

El de cabellos rubios soltó una carcajada.--Está bien, Jace, no voy a molestarte. -dijo, mientras se acercaba a su novio.- ¿Vemos una película?

Jacaerys asintió con una sonrisa, mientras dejaba que su novio se siente a su lado, y se pegue a él en un abrazo.

--¿Algún pedido especial? -preguntó Aegon mientras abría su cuenta de Netflix.

--Creo que una comedia estaría bien. -respondió el menor.

--Bien, una comedia será. -dijo el rubio, para luego dejar un pequeño beso en la mejilla de su novio.

Jacaerys aún no lograba entenderlo.

¿Cómo logró este torpe muchacho hormonal conquistar su corazón?

Él siempre se consideró una persona centrada, que sabía priorizar lo que era realmente importante en su vida.

Jacaerys Strong la tuvo clara desde un inicio, él quería a alguien igual de centrado que él, que no viviera en las nubes, alguien tranquilo, que no sea tan afectivo, ya que a él le gustaba tener su espacio personal, alguien que le convenga, con quien llevar una relación sería, sin muchos problemas ni muchas emociones fuertes.

Por eso es que aún le es difícil entender cómo ahora tenía como novio a Aegon Targaryen, un hombre que definitivamente no encajaba con su ''tipo ideal''.

Aegon era de todo menos tranquilo, siempre con un nuevo problema de por medio, tratando de hacer cosas nuevas, arriesgándose, alguien soñador y muy afectivo. A Jacaerys a veces le desesperaba.

Hace ya siete meses que se conocieron, durante una fiesta benéfica que estaban dando los padres de su ahora novio, Viserys y Aemma Targaryen.

Su primera impresión fue definitivamente muy alejada a la realidad, Aegon se veía impecable, con una pequeña sonrisa que le hacía parecer el menor de sus cuatro hermanos, siendo que únicamente su hermana, Rhaenyra Targaryen, era mayor que él.

Ambos habían estado hablando durante casi la mitad del evento, y cuando el rubio insinuó el volver a verse, Jacaerys había aceptado. Porque siete infiernos, Aegon es jodidamente hermoso, y bueno, él realmente pensó que podía encajar con su ''tipo ideal''.

Ya tenía planeado el cómo sería su cita, recogería a Aegon a las siete de la noche de su departamento, irían a un restaurant que quedaba cerca de su residencia, hablarían un poco más, y luego verían qué más pasaba. Sin embargo, para su sorpresa, el mayor había insistido en llevarlo a un lugar especial, que terminó siendo un parque de diversiones, Aegon hizo que se subiera a la montaña rusa, a la rueda de la fortuna y a un montón de juegos más. Hubo un momento en el que Jacaerys en verdad creyó que iba a vomitar.

Debería haberse molestado, aceptar que no eran compatibles y seguir cada uno por su lado, pero se encontró riendo a carcajadas junto al rubio mientras comían algodón de azúcar.

Esa primera cita definitivamente no fue lo que Jacaerys esperaba. Aun así, aceptó ir a una segunda cita con el mayor, y a una tercera, y a una cuarta, y a una quinta, y así sucesivamente, hasta que luego de tres meses de andar en salidas el mayor lo besó, para luego confesarle lo mucho que le gustaba y lo encantado que estaría de que lo suyo fuera oficial. Jacaerys no pudo evitar aceptar.