Había una vez en un reino, el más grande de todos los reinos del mundo, porque poseían más de 1000000 caballeros, pero entre todos esos caballeros se destacaban dos, el caballero negro y el caballero blanco.
Un día, el Rey decidió darles un desafío, no cualquier desafío, sino uno donde su mayor arma sea el pensamiento, entonces pidió al mago Merlín que le ayudase en este desafío.
El mago reunió a todos los caballeros del reino y con voz fuerte dijo:
-Dentro de dos meses crecerá un trébol de cuatro hojas en el cementerio de bosques, el que lo encuentre tendrá toda la suerte que el necesite, es más, le sobrará. ¿Quienes se atreven?
Muchos de los caballeros se negaron, porque en el cementerio de bosques no crecía nada, como su mismo nombre lo dice: "Cementerio de Bosques", todo estaba muerto ahí y algo que crecía seguro moriría.
Además de perderse dos meses, les faltaría comida, agua, un lugar donde dormir o descansar y muchos no verían a sus esposas, así que retrocedieron al desafío.
Pero solo dos caballeros aceptaron, el caballero negro y el caballero blanco. Estos caballeros se consideraban los más fuertes y sabios.
Entonces Merlín les indicó dos senderos, el caballero negro partió primero por el sendero más oscuro, en cambio el caballero blanco se quedó pensando si en verdad quería aceptar el desafío, ya que en dos meses podía perder muchas cosas, como su familia, sus terrenos e incluso podría morir en el camino, pero en cambio si no perdería esa suerte y ante su oponente el caballero negro; con esto en la mente partió en busca del trébol de cuatro hojas.
Los caballeros se perdieron durante un mes, dentro de ese mes, el caballero negro se encontró con un hombre viejo, sucio y gruñón. Este caballero le preguntó si vio un trébol en el cementerio, pero el viejo le respondió:
-!Estás loco! ¡¿Quién te mintió?! Ningún animal, planta o ser puede sobrevivir en este lugar, yo soy un enano de tierra, conozco este territorio mejor que nadie más, así que mejor vete y no pierdas tu tiempo.
El caballero blanco también se topó con el mismo enano, preguntó si había un trébol en el cementerio, pero este enano le respondió lo mismo que al caballero negro.
Pero el caballero blanco le preguntó al enano porqué no crecía ningún tipo de planta, el enano le dijo que para que creciera algún trébol, la tierra debe ser fértil, debe haber por lo menos una abertura por donde pasara el sol y una pequeña laguna que pasara por aquella tierra fértil.
Por otro lado, el caballero negro se cansó de buscar, pues ya estaba por terminar el segundo mes y decidió retirarse e irse al reino.
En cambio el caballero blanco decidió preparar la tierra, volverla fértil. Cortó las ramas de los árboles para que pasara la luz del sol por la tierra e hizo un riachuelo para que la tierra siempre esté fresca.
Quedaba solo un día y esos dos caballeros descansaron aquella última noche en el cementerio del bosque.
Al día siguiente, el caballero blanco se despertó y se halló una gran sorpresa, dentro del terreno que preparó, creció aquel tan famoso trébol y se lo llevó al reino.
Al regresar, notó que el caballero negro regresó con las manos vacías, entonces el caballero blanco comprendió que la suerte no venía por sí sola
...Uno tiene que crear su propia suerte...
Fin