Estas desnuda??

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Sacudí mi cabeza tratando de dejar de pensar en eso, al menos ya se había ido sin siquiera pedírselo.

A quien quiero engañar, no me gusto para nada la forma en la que se fue, se veía realmente mal y todo era por mi culpa.

Volví a arrastrar la cubeta hacia la pared, necesitaba terminar esto hoy, me subí y comencé a lijar la parte más alta de la pared, era bastante frustrante pues ni con la cubeta podía alcanzarlo fácilmente, tenía que pararme de puntas para apenas y poder alcanzarlo y era demasiado cansada esa posición sumándole la fuerza que tenía que aplicar para poder quitar la pintura vieja con la lija.

Estuve así por varios minutos, hasta que de repente el sonido de mi celular llamo mi atención, (¿Sera Noah?), trate de apresurarme en bajar, pero por no poner atención, la cubeta se ladeo haciendo que perdiera el equilibrio y me diera tremendo golpe en la parte baja de la rodilla, alcance a meter el brazo para no golpearme la cara.

-Maldita sea!!-. Grite de dolor, todo esto es por culpa de Noah, me quede en el suelo retorciéndome por unos minutos, me dolía bastante más que nada el golpe en la Tibia (Ósea la parte debajo de la rodilla).

-Me duele bastante-. Volví a decir en voz alta, como pude me arrastre hacia el sillón, tome el teléfono con la esperanza de que fuera un mensaje de Noah explicándome lo que había ocurrido, pero no fue así, era Sandra.

-Por fin termine de cocinar, ya me voy a descansar, buenas noches-. Es enserio que por esto casi me mato.

-Descansa buenas noches-.

Me salí del chat y abrí la conversación de Noah y fue allí donde recordé que lo había bloqueado ''Bloqueaste a este contacto. Toca para desbloquearlo.'' Gracias a ese mensajito (Mierda) Que tal si me envió mensajes ahora ya no podré verlos.

¿¿Que debería hacer?? lo desbloqueo?? 

(Kate concéntrate, recuerda que ya no lo quieres en tu vida) si se sintió mal por algo que hice pues es su problema, y punto, yo siempre le eh dicho que se aleje de mí, y si ya no vuelve pues mejor para mí así que no me importa nada de él.

Mire mi pierna ya estaba comenzando a enrojecerse por el tremendo golpe que me di al igual que mi brazo, lamentablemente, aunque quisiera seguir, en este estado me era imposible, camine con esfuerzo a mi habitación me quite la ropa que traía puesta y la arroje al suelo, tal vez mañana amanezca mejor, me deje caer en la cama, estaba cansadísima y no tarde mucho en quedarme dormida.

A la mañana siguiente.

Abrí mis ojos con esfuerzo no sabía qué horas eran, pero de lo que estaba segura era que era muy tarde, me incorporé en la cama, me dolía el cuerpo como nunca, y los golpes ya tenían el típico color morado, se ven horribles.

Me levanté de la cama, tal vez una ducha me vendría bien para relajar mi cuerpo, camine hacia el baño me comencé a duchar, el agua estaba caliente, pero se sentía super bien.

Sali de ducharme y escuche que tocaban la puerta (¿Quién será a estas horas?) No tenía ni la menor idea, tome mi toalla y la enrolle en mi cuerpo, era algo larga y solo me asomaría para ver quien era, tal vez era la casera.

Sali del baño mientras iba mojando todo el suelo ya que mi cabello no dejaba de gotear, mientras que la persona detrás de la puerta no dejaba de tocar.

-Voy-. Sentía que me iba a resbalar si aceleraba más el paso, por lo que traté de ir con cuidado, estando frente a la puerta la abrí levemente y para mi maldita sorpresa era el, nos miramos a los ojos.

-Qué demonios haces aquí?? deberías estar trabajando-. Dije sin abrir completamente la puerta, el me miro con cara de confusión.

-Vengo a cumplir, mi parte de la apuesta y te traje esto-. Dijo mientras mostraba por la delgada rendija una bolsa de papel blanca. -Puedo pasar??-.

-No, estoy indispuesta-.

-Estas desnuda??-. Dijo mientras se le formaba una sonrisa traviesa en los labios. -Ya déjame pasar, sirve que voy avanzando mientras tú te arreglas-.

-Ya te dije que no.

-Entre más rápido terminemos más rápido me iré.

-Pero esta vez te iras para siempre, escuchaste-. Dije mientras abría la puerta.

-Eso, solo el destino lo sabe-. Dijo mientras pasaba y caminaba hacia el comedor.

-Cuidado que el suelo esta mojado-.

-Oh no había visto, lo siento-. El agua mezclada con la tierra de sus tenis quedo marcada en la loseta.  -Ahorita lo limpio-.

Dejo la bolsa en la mesa, luego se dio vuelta, sus ojos se posaron en el brazo donde tenía aquel morete, se me quedo viendo fijamente y luego camino hacia mí, sujeto mi brazo y dijo.

-Es enserio?? no me hiciste caso??, mira lo que tienes allí-. Dijo señalando el otro morete debajo de mi rodilla. -Está bien morado.

-Hay ya deja de ser tan exagerado, no es nada en unos días se me quita.

-Ya te pusiste algo?

-Oye, creo que sería mejor que me cambiara ¿no crees?, me siento incomoda estando así-.

-Okey cámbiate iré por algo a la farmacia para ponértelo, porque estoy seguro de que no te pusiste nada.

-Has lo que quieras-. Camine hacia el baño y el salió de la casa sin decir más.

(Vaya tipo, en verdad que no lo entiendo, ahora resulta que se preocupa por mí) termine de cambiarme, camine a mi habitación y comencé a secarme el cabello, (digo yo que hace a estas horas del día aquí), se supone que debería de estar trabajando, me mire en el espejo, la verdad si se veían muy mal los moretes.

Termine de arreglarme al final me puse la misma ropa que ayer, ya que a lo que se veía hoy si se empezaría a pintar este lugar, me volví a hacer una cola alta y camine hacia la sala, desde allí podía tener una vista perfecta de aquella bolsa de papel blanca que había traído, la curiosidad me invadía, no entiendo porque todas las veces que viene para acá siempre trae algo nuevo.

Me deje caer en el sillón, sentía que ya se había tardado bastante, mire la pared, tratando de imaginarme como se vería con el nuevo color ya que, así como estaba se veía realmente horrible, deje caer mi cabeza hacia atrás, teniendo solo a la vista el techo, el silencio del lugar me hacía sentir extraña.

Desde que se fue Jack no eh hecho más que llorarle y extrañarlo, pero después de esa fiesta, después de conocer a este chico...yo... siento que muchas cosas han pasado, siento que... De cierto modo el me ha ayudado a ya no estar tan triste y deprimida, pero me preguntó... cuando deje de venir... Que pasará conmigo!?

Después de El...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora