El Mafioso Y El Stripper [Adapt./PinSon]

🔸Cap. 19

Perth regresó a su casa solo, y un poco desganado, sí ahora lo admite le había tomado un cariño a Saint, desde la primera vez que lo vio llamó su atención moría por tenerlo en su cama, pero ahora era diferente no solo lo quería en su cama sino también en su vida.

Se sintió mal al ignorar aquella inocente sonrisa que le regaló Chris, pero tenía miedo y estaba dispuesto a dejar de ir al club, dejar de verlos, así se olvidaría con facilidad no quería meter a nadie en su complicada vida.

•|•|•

Ohm estaba en la cama de Nico durmiendo con él, si se habían reconciliado después de todo ante Nico solo fue una discusión.

Acarició el castaño cabello de su compañero mientras daba besos en su cabeza.

– Chiquito.. ¿Estás despierto aún? –susurró Ohm.

– Sí.

– Perdóname.

– Ya te dije que te perdono, ambos discutimos yo no me expresé bien, solo quería decirte que aún no estoy listo para un compromiso tan grande y no supe cómo decirlo –excusó sus palabras hirientes que le dijo el día de la discusión. Nico colocó su mano sobre la de Ohm que ahora estaba en su cintura– Te amo.

– Yo también te amo, y perdóname –se disculpaba nuevamente pero no por la discusión sino por haberse acostado con alguien más, aunque Nico no lo supiera; se comportó como un imbécil, la mayoría del tiempo actuaba así no valoraba lo suficiente a su novio– Yo cometo muchos errores y me arrepiento de ellos.

Nico no entendía por qué se disculpaba tanto ya habían hablado de ello, se giró para quedar frente a frente con Ohm, lo miró a los ojos y sonrió, el pelinegro no pudo amar más esa sonrisa. Si tenía un chico lindo a su lado, odió por un momento engañarlo, lo engañaba de diferentes formas, la primera haciéndole creer que era el escolta de un empresario y segunda lo había engañado varias veces con varios chicos y chicas.

Aunque ambos guardaban secretos, ambos eran distantes a las mentiras del otro.

– Todos nos equivocamos, bebé –susurró el moreno antes de besar a su novio, para finalmente ambos dormirse.

•|•|•

Perth estaba desayunando solo, sabía que Ohm se había quedado en el club la noche anterior, además no le preocupaba él sabía cuidarse bien.

Tenía pensado ir a la escuela de Chris, para encargarse de la colegiatura, eliminaría una preocupación más de su chico. Planeaba que debía decir para que no hubiera sospecha que le permitieran pagar sin decirle algo a Saint.

– Jefe, una patrulla se acerca a la propiedad ¿Qué ordena? –le interrumpió esa noticia ¿Qué hacía una patrulla en su casa?

– Quiero que todos, absolutamente todos dejen sus puestos y vayan al campo, no quiero que se mire nada extraño –ordenó levantándose rápidamente del lugar en que desayunaba, subió a su cuarto a lavarse los dientes con tranquilidad, puso su arma en su funda y abotono su saco, tenía que conversar con un policía.

Salió de su casa justo cuando el portero se acercó a decirle que un policía lo buscaba.

– Déjalo pasar.

Fingió tener prisa, parándose a un lado de su auto, el policía entró, solo era uno.

– Buenos días Sr. Tanapon, soy el agente del FBI Nanon Korapat, mucho gusto –saludó amablemente el hombre frente a Perth, y ganas inmensas de asesinarlo invadieron al pelinegro pues recordaba ese nombre, fue el mismo policía que operó cuando su cargamento de armas fue decomisado.