Oxígeno... Oxígeno...
Palabras; vacías.
Aliento: vida.
Los lagrimales empiezan su función. Gota a gota ruedan sobre secos pómulos llegando a ser saboreadas; saladas.
Pedazo a pedazo es como quiero. Pedazo a pedazo... Aun me sostengo.
Veo la sombra de tu rostro y empieza mi músculo cardíaco a golpetear.
Dudo.
Tal vez sea convicción o ¿quizá es temor?
Alcohol.
¿Dónde está el maldito frasco de licor?
La falta de sueño termina en embriaguez llevándome arrastrado a idiotez.
Sorbos iguales a palabras amargas.
Cerebro semejante a juzgador.
Musa...
El suspiro de mis deseosas iris.
No hay sentido.
Bueno, hubo un sentido. Un copo de nieve "la chica de ojos café".
Tiempo presente un vaso de cristal y buen licor añejado.
¡Madrugada larga!
Pronostico de las doce treinta.
