EL MINISTERIO DEL TIEMPO (ALBAYA)

TIEMPO FINAL (Segunda parte)

Madrid, 3 de Diciembre de 2027

—¿Y qué pasó entonces?

—Luz, si no dejas de interrumpirme como voy a contarte la historia... Por donde iba...

—¡Mami estaba apunto de ser la Guardiana!

—Ah si... Estábamos en 1938 en un camino en medio del bosque muy cerca del castillo...

Aura y Olivia habían llegado a los pies del castillo, por alguna razón la rubia sabía donde debía ir, como si algo la llamara hacia ese lugar. Seguía convencida de su decisión, si el plan de Mikel se basaba en su nacimiento, encontraría la forma de impedirlo. Aura en cambio no lo tenía tan claro, entendía lo que Olivia pretendía, pero pensar en perderla para siempre, aunque ella dijera que no la iba a recordar, no le parecía ni por asomo la mejor de las soluciones.

—Vamos. —dijo Olivia pero Aura no se movió— Cariño ya hemos hablado de esto.

—Pues volvamos a hacerlo. —dijo la morena sentándose en el suelo— Hablemos hasta que cambies de idea y dejes de querer desaparecer de este maldito mundo y de mi vida.

Olivia se puso en cuclillas frente a ella, Aura miraba sus pies para evitar los ojos de la rubia, también a Olivia le dolía aquello aunque no encontrara una solución mejor. La morena levantó la vista en cuanto sintió la mano de la rubia en su mejilla, ambas lloraban y Aura no lo dudó, se abrazó con fuerza a aquella mujer de la que ya no podía estar un minuto separada. Daba igual el tiempo, el que llevaran juntas, el que no, el futuro o el pasado, sus hilos estaban unidos por lo inevitable, así que no iba a perderla costara lo que costara.

—Si Mikel cumple sus planes será imparable. —dijo Olivia aun entre sus brazos.

—Nadie es imparable, todo el mundo tiene un punto débil solo hay que pararse a pensar cual es el suyo. —Olivia miró a su chica y Aura vio esa pequeña duda que necesitaba para convencerla— Si tu desapareces y eso no impide que él alcance su poder te habrás sacrificado por nada.

—Pero Javi dijo...

—Javi dijo que obtendrías el poder de las puertas, no que él fuera a poseerlo.

Olivia se mordió el labio, hacía unos minutos estaba completamente convencida de que la solución era impedir su nacimiento, pero ahora. ¿Y si Aura llevaba razón y aun así Mikel lograba su cometido? Quizá se les escapaba algo, puede que no fuera tan mala idea eso de buscar el punto débil de Mikel. ¿Pero cuál era?

—Quizá la solución es precisamente ese poder.

—Ni si quiera sabemos qué es o como lo puedo conseguir. —Olivia se sentó a su lado y Aura aprovechó para tomarla de la mano— Sabes que yo tampoco quiero perderte, ¿verdad?

—Claro que lo sé por eso vamos a encontrar una solución a todo esto. —Besó sus nudillos y le sonrió— Averigüemos como funciona ese poder de las puertas.

—¿Cómo pretendes hacer algo así?

—Buscando una puerta.

Olivia la miró con preocupación, tampoco le hacia mucha gracia eso de hacerse con el poder de las puertas, no sabía que podría causar eso en ella, ¿y si se perdía? Aura en cambio, decidida como estaba en no dejarla impedir su propio nacimiento, no pensaba en aquello aun.

El coche había llegado al hospital y se llevaron a María y Marina dentro para atenderlas, la menor de las Reche solo tenía unos cuantos golpes y contusiones, pero el estado de María era mucho más grave y preocupante. Alba estaba con su hermana, mientras Natalia y Javi se habían quedado en el interior del vehículo, era peligroso para la morena estar ahí así que mejor que no se moviera del coche por si acaso.