Capitulo 3

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Narradora:

-Miguel Ángel... Miguel...Angel.. Miii....guel....- decía Ruben en susurros mientras descansaba en su cama, no dejaba de pensar en él, la manera tan amable en la que lo trataba, su sonrisa, sus ojos y su acento- Miguel...

De pronto tocan el timbre de su casa y se levanta de la cama, un poco temprano, al abrir esta el cartero, en su mente decía "A que hora se despiertan estos?". Ya que eran las cinco y media de la mañana.

-Buenos días, ¿señor Doblas?- dijo sonriente

-Si- dijo Ruben fríamente y cortante

-Ehh tiene un paquete- busco en su bolso- tenga- le entrego la pequeña caja

- ¿Quién la mando?

-No lo sé, disculpe- acomodo sus cosas y le extendio un papel para que Ruben firme y así lo hizo- que tenga un buen día señor Doblas- y sin decir más el cartero de fue de la puerta de entrada muy feliz.

Ruben entro al interior de su casa algo confundido por no saber quien le mandaba el paquete, se sento en el sofá y saco una navaja de su bolsillo, ya que tenía muchas y por todas partes, corto la cinta que envolvía en el paquete y este contenía dinero, cartas, y fotos de sus padres. Guardo el dinero en su billetera, tomo las fotos y sin remordimiento alguno las lanzo al potente fuego de la chimenea.

Tomo el teléfono y bajo cualquier juego para pasar el rato y sin darse cuenta paso pegado a la pantalla hasta las siente y media, se ducho y sin comer salio a la velocidad de la luz de casa camino a la escuela.

Cuando llegó estaban apunto de cerrar el portón y por un poco de suerte consiguió entrar.

-Señor, llega atrasado- dijo una mujer mayor, la directora. Ruben solo la miro y luego se fue a su curso, al intentar abrir la puerta esta estaba cerrada, toco para que alguien le abriera y allí estaba... Miguel.

-Hola, pensé que no vendrias- dijo abriéndole paso

-Si, yo pense lo mismo, creí que no me dejarían entrar, que paso y donde esta el profesor?- dijo ojeando el curso para ver si lo encontraba pero no fue así

-Fue a ver algunos materiales y cosas para trabajar en parejas, hablando de eso... ¿Quieres...ser mi compañero de trabajo?

-Eh...-Ruben pensó un poco pero al final se decidio- si claro, luego me ponen con alguien ma5s.

Todos se acomodaron en sus asientos cuando llegó el profesor de arte, un hombre alto, flaco y de cabellera blanca.

-Bueno jóvenes, supongo que ya tienen algún compañero o compañera de trabajo para el proyecto que vamos a hacer- dijo guardando unos pequeños materiales en una bolsa plástica- bien, el proyecto que harán sera del material que les salga, hay uno que otro repetido pero espero que hagan un excelente trabajo para una excelente nota. Recuerden que estos proyectos son los más importantes par la nota final. Bien empecemos por aqui- extendió la bolsa hacia Miguel que sin dudarlo dos veces tomo un material y era plastilina.

-No esta mal- dijo Ruben acomodándose en su asiento

-No, de hecho, creó que esta fácil, quieres que vaya a tu casa para trabajar o tu vienes a la mía?

-No lo sé, como sea, haremos el proyecto y eso sera lo importante, pero mejor voy a la tuya, así que dame tu dirección.

-jajajaja ven- tomo a Ruben del brazo y lo llevo a la ventana del salon que tenia una buena vista.- ves la casa verde con blanca de cuatro plantas? - señalo con su dedo la casa indicada, estaba a dos calles de la escuela.

-Ok, hoy estaré allí a las siete, ¿vale?

-Vale- Miguel le regalo una sonrisa hermosa a Ruben y este le respondió con un notorio sonrojo.

-Ehhhhh señores, sentarse por favor- dijo el profesor, ambos rodaron los ojos y sin ninguna elección más se sentaron.

Ambos pasaron nuevamente el receso, se reían, cosa que a Mangel le gustaba ya que ese era uno de sus objetivos, los dos disfrutaban del tiempo que estaban juntos, Miguel defendía a Ruben y este ya no era tan fastidiado como antes.

El timbre de la salida sonó haciendo que todos guarden sus cosas para salir rápido.

-¿Hoy vas cierto?- dijo Miguel arrimado en el marco de la puerta.

-Si, si, hoy voy- dijo recordando ha que por casi se le olvidaba.

Miguel caminaba a pasos largos para llegar lo más pronto a casa, abrió rápido y camino hasta la cocina sorprendiendo a su madre.

-Hola mamá- beso su frente- por favor prepara sándwich de queso o algo así para comer que ya mismo viene alguien, si pls- puso sus manos juntas en forma de suplica

-Hola cariño, claro, claro ahora mismo me pongo a preparar todo, por cierto  ¿quién viene que estas tan emocionado?- dijo la sonriente mujer.

-Ehm un amigo- sonrió, la mujer le miro pícaramente y río bajito.

-Claaaaro un amigo- negó juguetona- vamos ve a ducharte y arregla tu habitación.

-Cierto, gracias mamá, te quiero- salio el pelinegro casi corriendo a su habitación.

Ruben por mientras estaba decidiendo en que camisa ponerse, no sabia cual de las dos así que tomo su sudadera y se la puso, le haría calor pero aun estaba fresco por haberse bañado, cogió unos jeans negros y se coloco los zapatos, ya eran las siete y como Miguel vivía cerca camino lentamente.

En el trayecto viene el grupo que siempre lo molestaba y uno sorprendiendolo, le marca un puñete en toda la boca llenandola de sangre al instante, Ruben corrió lo mas rápido que pudo y llego a casa de Miguel, por suerte había perdido de vista a los "matones".

Toco el timbre por segunda vez y apareció una señora muy bonita y dulce.

-Hola, supongo que tu eres amigo de Miguel, ven cariño pasa- dijo abriéndole el paso al interior de la casa.

-Hola señora, permiso- dijo entrando muy avergonzado, en eso Miguel baja viéndolo de pies a cabeza, y se da cuenta que su labio esta con sangre.

-¿Qué te paso?- pregunto rápidamente

-Nada- dijo Ruben con un hilo de voz

-¿NADA?- dijo un poco mas alterado que antes

-Joder que no importa, ahora vamos a hacer el proyecto- dijo sonrojado por la preocupación de Miguel.

Ambos subieron las escaleras, Mangel le mostró su habitación y le dijo que se quedara allí mientras traiga algo para limpiarle la sangre que tenía en su labio, no era mucha pero él quería hacerlo, necesitaba ver en buen estado a Rubius.

-Tu.. Quieres- extendió el alcohol con un pedazo de algodón, este lo cogió y empezó a limpiar su herida.- bien... Tengo demasiada plastilina así que eso no sera problema... Dime que vamos a hacer?

-Tal vez a alguien... Una persona

-¿A quién?

-No sé, tu decide- dijo Ruben pasando sus brazos por detrás de su cuello.

-Tal vez a ti-dijo en un susurro que Ruben no alcanzo a escuhar- un bosque, no se una planta o frutas..

Los dos jóvenes decidían que harían mientras cruzaban miradas, ambos se sentían nerviosos pero nada incomodo de hecho les gustaba estar así.

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Hola criaturitas marvadas :DD que tal? Bien? Perfecto :') así me gusta *w* jajajaja estoy planeando algo rarillo pero no se.. Jajajaja bueno eso sera mucho más adelante por mientras disfruten estos caps, os hamo muchito ^^
Beshossss :**
Ya saben, si quieren una dedicación pidanla :D (ayer pase un buen rato buscando como hacer las dedicaciones :v)

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Bai ✌

Obsesión † RubelangelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora