Ahí estábamos. Dos almas que habían estado dos semanas con muchas confusiones, pero que a pesar de eso, había conseguido demostrarse el amor y el apoyo que necesitaban. Ahora estábamos juntos. Nadie nos podía decir lo contrario. La lucha había valido la pena. Adiós a mis mierdas mentales y hola a mi nuevo significado de estar enamorado: Olivia.
Sus besos me habían curado. Habían sido dos. Los tenía contados. Ahora quería volver y darle el doble. Nunca he fumado, pero sé que esto es una adicción más necesaria y positiva. Quiero estar abrazado a ella todo el día. Darla el amor que merece. Decir "te quiero" en un intervalo de dos frases era algo que nunca había hecho, pero iba a acostumbrarme.
Solo quiero dar las gracias a Olivia por haberse dado cuenta de que a veces, hay chicos que te miran con una mirada brillante y verdadera. También, se ha dado cuenta, de que alguien llamado Dani fue el primer chico en mirarla de esa manera.
Yo lo dije al principio de esta historia: Su sonrisa no se apagará mientras este entre mis brazos.
El sábado nos habíamos declarado, nos habíamos besado y nos habíamos dado nuestros respectivos números. El domingo, nos dimos los buenos días por mensaje y pasamos toda la mañana hablando hasta que ella tuvo que irse para hacer algo con su hermano. Finalmente, había llegado el lunes. Estaba a punto de comenzar nuestra primera semana siendo..., ¿Pareja? No habíamos hecho nada oficial, o sea, dijimos que nos gustábamos y nos dimos dos besos, pero en ningún momento dijimos: ¿Quieres salir conmigo? Yo lo estoy dando por hecho y a lo mejor eso es malo.
Por fin había llegado el lunes y estaba deseando pasar mi primer día abrazado a ella. Jamás la soltaría. Eso lo tenía claro.
Como aún no había arreglado las cosas con Ana, quedaría con Olivia para ir al instituto y yo no podría estar más nervioso.
-Buenos días-. La saludé cuando abrí la puerta del portal y la vi esperándome ansiosa.
-¿Buenos días?, ¿Sólo me vas a decir eso?
-Buenos días a la niña más perfecta y maravillosa que he podido encontrarme, ¿Así mejor?
-Así esta perfecto.
Entonces nos dimos un beso.
Pensé que había sonado un poco cursi, pero yo quería que esto funcionase y si para eso tenía que decir cosas cursis, pues se decían.
-¿Hoy también nos reunimos con Alba?-. Pregunté.
-No, ya la he dicho que hoy quería estar contigo. No hemos podido compartir el fin de semana, así que voy a aprovechar todos los segundos de hoy para poder estar contigo.
-¿Sabes que te quiero mucho?
Me miró con una sonrisa.
-Yo a ti más.
-No hagas eso.
-¿El qué?
-Mirarme con esa sonrisa. Tu sonrisa. Es que me encanta y llevo queriendo decírtelo desde el primer día y siempre que me miras así me enamoro más todavía y si encima me dices que me quieres...-. Paré al darme cuenta que se estaba riendo.
-Perdón por reírme-. Dijo intentando frenarse.
-Que lo digo en serio.
-Lo sé, por eso me rio.
-No lo entiendo.
-Eres muy mono y eso es una de las cosas que más me gustan de ti. Sé que apenas te conozco todavía, pero extrañamente siento una sensación cuando estoy a tu lado que nunca antes había sentido con nadie y con eso ya me basta para saber que eres todo lo que quiero y cada día me lo demuestras más. Hoy por lo que acabas de decir, ¿Sabes que yo tenía una inseguridad por mi sonrisa?
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Mi significado de estar enamorado
Teen FictionA un pequeño paso de graduarme de la ESO, llega el momento de comenzar mi historia de amor con Olivia, una chica que desde el primer día me demostró que ella sería mi felicidad. Al fin he conseguido salir con ella y ahora voy a hacer todo lo posibl...