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Jisung miró el reloj de su teléfono, aún tiene algo de tiempo para calificar tareas.

Quedó en almorzar con Jeongin y Félix cerca de la universidad, en esta ocasión Changbin no podría unirse, ya que el lugar a donde fue transferido está un poco más lejos y su horario de comida no alcanzaría para ir y volver.

Jisung extraña esas conversaciones de colegas que solía compartir con Changbin quien siempre estaba a su lado, pero definitivamente está feliz por la forma en la que su mejor amigo defendió su decisión, nunca imaginó a Changbin enamorado, y mucho menos de un jovencito tan ocurrente como Seungmin, pero esa diferencia entre ellos los hacía ser una pareja "equilibrada".

Félix también estaba mucho mejor, ha estado recibiendo clases de costura, Jisung recuerda que en la universidad, Félix siempre la pasaba improvisando ropa que terminaba siendo algo innovador y practico, pero después de casarse había hecho a un lado su pasión por diseñar ropa, y ahora que es... "libre" de nuevo retoma esa viejas habilidades que nunca se fueron, el acuerdo de divorcio fue completado, Hyunjin no se veía tan bien como Félix, pero ahora parecía más centrado y también preocupado por sus hijos, de alguna forma arregló sus horarios con la emisora para poder pasar tiempo de calidad con Jungsu y el bebé.

Por otro lado, y contrastando demasiado, Jeongin se encuentra... atascado, no avanza ni retrocede, a pesar del gran paso que dio al confesar todo a sus padres y tratar de ser más... "independiente" no ha logrado nada con Chan y cada día parece más desanimado, Jisung a veces tiene la intención de hablar con Chan, pero definitivamente esto es algo que Jeongin debe hacer solo.

Finalmente, él y Minho ya eligieron un buen departamento con el espacio suficiente para la familia que está a muy poco de formarse, su estómago no ha crecido demasiado, pero ya puede notarse ligeramente, decir que no está emocionado por su cachorro sería mentir, al principio estaba algo reacio, pero después de ver a Minho trabajar duro para darle un hogar cómodo, Jisung comenzó a desear tener ya a su bebé.

Miró su reloj de nuevo y esta vez guardó sus cosas, salió de la oficina y se dirigió a la puerta principal de la universidad, Jeongin ya estaba esperando por él junto a Félix en el auto.

Eligieron un restaurante familiar para estar más tranquilos.

—¿Y los niños? —preguntó Jisung a Félix.

—Sorpresivamente Hyunjin tenía el día libre y llegó con su madre al departamento, dijo que saliera sin pendiente, ellos cuidarían a los niños —explicaba Félix mirando la carta.

Jisung asintió e hizo su pedido, seguido de Jeongin y finalmente Félix.

Cuando se hallaron con sus pedidos listos, Félix fue el primero en preguntar.

—¿Cómo vas con el chico? —miró a Jeongin.

El omega Yang sonrió apenado.

—No hay avances.

Jisung no estaba sorprendido.

—Pero, debe haber algo que comentar, ¿no?

Jeongin lo pensó un poco,

—Él... parece molesto cuando estoy cerca, no lo sé, es complicado.

—¿Por qué no le preguntas directamente? —opinó Félix.

Jeongin no dijo nada, la verdad no había pensado en hablar con él directamente.

Jisung suspiró entre divertido y algo fastidiado.

—Por favor, dime que sí le hablaste sobre tus intensiones.

—¿Tenía que hacerlo? —respondió Jeongin con duda.

Treinta y dos ☘ ChanInDonde viven las historias. Descúbrelo ahora