8

198 25 1
                                    

05/2019

Estaba caminando tranquilamente por los pasillos, cuando pudo divisar a "su gatito" colocando algunas cosas en su taquilla, no dudo ni dos segundos en acercarse a saludarlo.

-Buenos días tyunnie-. Se acercó sin que el menor lo viera, haciendo que se sobresaltara dando un pequeño brinco hacia atrás.

-¡Me asustaste! ¡¿Qué te pasa?!-. Dijo en un tono algo molesto, su mayor estaba algo cerca y sus nervios estaban a flor de piel, y siempre que eso pasaba sus emociones explotaban, simplemente no podía controlarse cerca de Soobin.

-yaya, lo siento gatito no fue mi intención-. Contesto el mayor mientras acariciaba la cabeza del menor de forma cariñosa, en vez de hacer que se sobresaltara más como solía pasar con cualquier contacto que tenía con él, se relajó y es que su punto débil eran las caricias en la cabeza, Soobin lo había descubierto ya hace un tiempo y podría ser que desde entonces abusaba de aquello para que el más bajo se relajara cuando sus emociones lo dominaban. Termino retirando su mano, recibiendo una mirada molesta del contrario, realmente disfrutaba cuando le acariciaba la cabeza y a veces desearía quedarse un día entero así, con el más alto acariciándolo y el completamente relajado y pudiendo tener sus emociones bajo control.

-No me mires así, no puedo quedarme todo el día acariciándote pequeño-. Definitivamente, moriría ahora, como Soobin podía ser así con él, sus mejillas se llenaron rápidamente de un color encarnado, el favorito de su mayor, sin duda.

-¿Por qué? Yo quisiera que nos quedáramos así todo el día-. A veces era demasiado bocazas y pensaba en alto justo como ahora, su mayor solo río enternecido viendo cómo las mejillas de Taehyun tenían un color más intenso cada vez.

-Eres demasiado tierno-. Fue lo último que uno de los dos dijo antes que cierta chica llegará.

-¡Hola, Buenos días, chicos! ¿Interrumpo algo?- claramente sabía que llegaba en el momento donde ambos estaban siendo tiernos el uno con el otro. Pero no sé arrepintió, al menos no por ahora, estuvo esperando justo cuando llegar para que ambos no pudieran seguir el coqueteó, pues sabía que cuando ella estaba los dos dejaban de ser melosos.

-¿Oh...? Buenos días, Arin-. Dijo el mayor, el menor simplemente no se sentía cómodo con Arin, por lo que simplemente asintió con la cabeza, Soobin se separó del menor, cosa que aunque lo pusiera nervioso, detestaba que pasará, odiaba que el más alto se separa de él, aunque suene cursi, pero no podía evitarlo.

-¿Soobin ya tienes pareja para el trabajo de ciencias?- si no fuera suficiente, ambos iban al mismo salón. Cosa que a Taehyun le hacía sentir con menos posibilidades con Soobin, aunque para muchos sea algo insignificante, Taehyun siempre vería a Arin como mejor que él, sin darse cuenta su rostro se entristeció, cosa que su mayor lo notó, por lo que le preguntó en un susurro si estaba bien, pero no pudo responderle, ya que la mayor nuevamente le pregunto lo mismo que hace algunos segundos.

-¿Ah...? Sí, lo haré con Yeonjun, lo siento Arin.- siquiera porque se molestó en preguntarle si siempre hacía todo con su mejor amigo y esta no sería una excepción.

Finalmente, la chica se fue, nuevamente Soobin preguntó a su menor si estaba todo bien, este negó, solo eran estupideces suyas, él no era nada más que un amigo, no tendría por qué sentirse celoso.

-Ey, Tyunnie, no tienes por qué decirme si no quieres, pero dime si hay algo que pueda hacer para que tu linda carita este feliz otra vez-. Las mejillas del menor nuevamente sonrosadas ¿Soobin pensaba que su cara era linda? Sentía que en cualquier momento se moriría. El mayor al ver que su lindo gatito estaba otra vez feliz y con sus mejillas coloradas tan características de cuando lo hacía sentir feliz o nervioso. Finalmente, quedaron en caminar juntos a sus casas a la salida, para luego ambos se retirarán a su aula correspondiente.

Actualidad

Otro día más de trabajo, estaba demasiado cansado, definitivamente no debería quedarse hasta las tantas escuchando música, pero era un mal hábito que tenía desde la secundaria. Era lunes, debía ir a la universidad por la mañana para luego ir a trabajar, tenía turno nocturno, sus vacaciones de otoño habían acabado, haciendo que sus días fueran más cansados y si bien era el primer día de clase después de las vacaciones, sabría que entre la tienda y la universidad acabaría muerto y completamente estresado, aun así tenía la suerte de ser un buen estudiante y de entender las cosas con facilidad, tal vez esa ventaja lo ayudaría a no morir en el intentó.

Se había despertado a buena hora, pero se retrasó, ya que se confió, entre ducharse, vestirse, arreglar su cabello y desayunar se le fue el tiempo y cuando miro la hora ya era tarde. Termino de cepillarse los dientes para salir corriendo por la puerta con su mochila, iba corriendo literalmente, pero una bicicleta se cruzó en su camino haciendo que retrocediera de golpe y así perdiendo el equilibrio, ese día llevaba pantalón corto, por lo que sus rodillas estaban raspadas y sangrando, ignoró el hecho de que tal vez hubiera demasiada sangre y se levantó, o mejor dicho lo intentó, ya que se calló en el instante. Era un desastre y muy dentro de él eso era lo que más odiaba de sí mismo, desearía tal vez ser más puntual y menos torpe. Estuvo un rato maldiciendo en voz baja, pues le dolía como el infierno, cuando escuchó una voz familiar, tal vez demasiado.

-¿Taehyun?- dijo una voz femenina a sus espaldas, se giró para ver quién era y sus sospechas eran correctas, era Arin, aquella chica que por mucho tiempo él tuvo celos, pero después no supo nada de ella.

-¿Arin?- un pequeño susurro salió de su boca, aun así su mayor lo pudo escuchar.

-¿estás bien, que te paso?- pregunto mientras se acercó cuando vio la escena un poco grotesca, su cara de preocupación era notoria y rápidamente empezó a comentarle que deberían ir a urgencias, lo que el peli-rosa negó, ya que tenía que ir a clase, aun así Arin se dispuso a acompañarlo, aunque ella también fuera tarde ese día y su universidad quedará a la otra punta. Aquella chica había cambiado mucho, casi ni la reconocía, era otra persona literalmente. Al llegar al campus, le dijo a Arin que no era necesario que lo acompañe más, la chica trato de insistir en llevarlo a la enfermería, pero el negó. Prefirió ir solo, llegando pudo ver una silueta familiar ¿Beomgyu? Que hacía su mejor amigo allí, por alguna razón sospechaba que se estaba saltando la clase.

-¿Beom que haces aquí, no había una asignatura obligatoria ahora?- no recordaba bien el horario, pero sabía que los lunes a primera tenía una clase obligatoria, trataba de recordar las clases obligatorias para no llegar tarde. Su amigo se asustó un poco, probablemente pensando que alguien lo descubrió.

-¿Tae? Me asustaste, bueno, se supone que es obligatoria, pero aquí estamos.- miro las rodillas del menor dándose cuenta de que hacía su amigo allí, rápidamente lo ayudo a entrar a la enfermería para que lo atendieran. No era grave, parecía, solo se clavó una roca algo grande y por eso fue que había tanta sangre, le curaron las heridas y rápidamente se fue a clase acompañado de su amigo, al cual obligó, ya que no quería que se saltara la clase.

Last love 🌱 TaebinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora