7: Tensión desvelada (quinta parte)

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Hinata, la joven Hyuga, se encontraba en su habitación, inmersa en sus libros de estudio. Su concentración fue interrumpida por las voces de Sakura y Naruto que resonaban en el pasillo. El tono elevado de Sakura despertó su preocupación y, a pesar de sus intentos por ignorarla, las palabras filtradas de la discusión captaron su atención. Preocupada por su amiga Sakura, decidió asomarse desde la puerta de su habitación para entender mejor lo que estaba sucediendo.

- ¡Por qué me haces esto! -exigió Sakura, su voz llena de frustración-. ¡Ino es mi amiga, y necesito que estés a mi lado en su fiesta de cumpleaños! -gritó Sakura, empujando a Naruto.

Naruto retrocedió, pero no se defendió. En cambio, respondió con calma:

-Basta Sakura. Te estás comportando como una niña y todo porque no comprendes un simple no.

Hinata observó con sorpresa cómo Sakura intentaba volver a empujar a Naruto, pero este le cogía las manos con firmeza.

La Hyuga debía admitir que esperaba que el Uzumaki fuera agresivo en la conversación, que le diera algún motivo para no desearlo como lo hacía, pero incluso en una pelea con su novia este guardaba la compostura tratando con paciencia aquella discusión.

- ¡Eres tan egoísta! ¿No puedes hacer un sacrificio por la relación?

Naruto soltó a Sakura suavemente, se cruzó de brazos y suspiró.

-No se trata de ser egoísta. Se trata de ser auténtico. No quiero forzar una situación incómoda solo para hacerte feliz.

Sakura frunció el ceño, sus ojos lanzando chispas. -¡Pero tú eres mi novio! -respondió Sakura, su rostro enrojecido por la frustración-. Deberías estar dispuesto a hacerlo por mí.

El Uzumaki miró a Sakura con seriedad. -No puedes obligarme a hacer algo que no quiero hacer. No es justo para ninguno de los dos.

Hinata seguía observando la escena con creciente preocupación, y pudo sentir la tensión en la habitación aumentar a medida que la discusión continuaba.

- ¡Esto es ridículo! ¡Cuando por fin tengo un tiempo libre para salir contigo tú no quieres acompañarme! ¿Qué tienes en contra de Ino? ¿Por qué la evitas? -gritó Sakura con frustración.

Naruto miró a su novia, su expresión seria.

-Sakura, te repito que NO me siento cómodo yendo a una fiesta a la que no fui invitado. Y con respecto a Ino...ella me incómoda porque... -Hizo una pausa, buscando las palabras correctas-. Creo que Ino podría tener sentimientos por mí.

La confesión de Naruto dejó a todos en la habitación en un silencio incómodo, y Hinata se llevó una mano a la boca en señal de sorpresa. La reacción de Sakura, sin embargo, no fue la que Hinata esperaba, ya que se echó a reír a carcajadas. Esta risa resonó en la habitación y se sintió hiriente.

- ¡HA,HA,HA,HA! Eres tan estúpido como las excusas que se te ocurren -se burló Sakura, sin considerar el dolor en las expresiones de Naruto.

Hinata pudo darse cuenta, aquel dolor provocado por la risa burlona de Sakura. Este hecho llenó a Hinata de empatía hacia él.

—No estoy bromeando. —dijo el Uzumaki con una mirada fría y calculadora, como si estuviera evaluando cada palabra antes de decirla—. He observado detalles específicos, comentarios que no encajan con la imagen que tienes de la situación. Mi percepción no se basa en suposiciones sino en evidencias. Lamento si esto te incomoda, pero es una realidad que no puedo ignorar. No debería ser motivo de burla, sino un asunto serio que debemos considerar con la misma gravedad que yo le doy.

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