Nota. Soy un ser humano que no puede estar tranquilo si no libera de alguna manera las ideas que le vienen en plena madrugada, así que heme aquí.
Disfruten de los pequeños one-shot que les traeré sobre historias que no pude desarrollar en el pasado. 🫂💕
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Ace's Boy.
Una risa juvenil se hace oír en el jardín trasero de una pequeña casa pero perfecta para la pequeña familia que la habita, un par de ladridos juguetones se hacen presentes también y combina de un modo armonioso con aquellas risas. El cielo se encontraba despejado y su calidez era apropiada para jugar un rato.
Una alarma se hace presente dentro del hogar, con rapidez el muchacho de piel pecosa se acerca hacía la puerta corrediza y así ingresa en compañía del gran perro. Acercándose a la cocina, apaga con una mano la alarma de su teléfono y con la otra la estufa.
Después se dirige hacía la alacena y abriendo una de las puertas bajas, saca lo necesario para preparar la comida de Stefan, quien permanece recostado fuera de la cocina y espera pacientemente su almuerzo. Justo cuando comienza a preparar la comida de su perro, la puerta de entrada suena.
—Vaya, hoy llegaste temprano Lu —saluda Ace, dando una suave sonrisa a su hermano pequeño. Misma que se borra lentamente al notar el aura deprimente con la que carga el otro azabache.
Luffy no regresa el saludo, en su lugar se quita torpemente sus tenis y tirando en la alfombra su mochila roja con variedad de llaveros; se deja caer dramáticamente en el sillón más grande.
Stefan mueve su cabeza entre el más pequeño del hogar y su dueño, sus ojos marrones transmiten su confusión ante el particular humor del estudiante. Ace no dice nada, se mueve en silencio por la cocina.
Guardando las bolsas y botes de comida, da una palmada en su muslo izquierdo para obtener la atención de su perro y así depositar el plato donde corresponde. Dejando una suave caricia en la cabeza peluda de Stefan; regresa a la cocina y comienza a servir la comida que preparó.
Acercándose a pasos silenciosos hacía la sala, deposita el plato en la pequeña mesa y luego toma asiento con tranquilidad en el sillón individual.
—¿Vas a decirme qué sucede o debo adivinar?
Un quejido sale del más joven, al tener el rostro enterrado en los cojines es difícil distinguir sus palabras. Cruzándose de brazos espera pacientemente por una explicación entendible.
—... El viernes habrá una actividad de padres e hijos —dice finalmente tras levantar un poco el rostro, su mirada se desvía un poco hacia el plato de comida.
El mayor frunce un poco los labios, recordando que el padre de Luffy se encuentra en estos momentos en el extranjero por cuestiones de trabajo. Le molesta un poco el hecho de que cada que está clase de actividades se presentan, casualmente Dragon no está, sin embargo, no puede enojarse realmente con el hombre, no cuando trabaja arduamente para darle lo mejor a su hijo único.
