Bajo El Muérdago

Better

Catarina estaba devastada, enojada. Se paseaba por el cuarto una y otra y otra vez. Mientras pensaba donde podía practicar el violin. Sino sus padres la iban a matar.
- Clary ya para, me mareas. - Habló su amiga Gigian
- No lo puedo evitar estoy furiosa, sería capaz de insultar ahora mismo.- Respondió Catarina.
- No lo hagas, te van a mandar con el padre lucas y te harán un exorcismo. - Comentó Gigian.
- Ojalá fuera una broma lo que dijiste y lo que pasó. - Dijo Catarina frustrada.
-¿Haz hablado con Anton? - preguntó Gigi.
- No, no desde lo que pasó la última vez. - Dijo Catarina muy estresada.
- ¿Qué pasó? - Dijo Gigi acomodándose en la silla en la que se encontraba y miró a su amiga con preocupación.

Flashback*

Anton estaba tocando el Cello con elegancia, parecía una película de un cuento de hadas. Catarina tenía que sacar su violin pero decidió mirarlo. Lo miraba más y más y sentía sus mejillas colorearse de color carmesí.
Él tocaba con toda la belleza de la música. Amaba la música como si fuera suya. Eso le parecía perfecto a Catarina acerca de Anton.
Entonces él paró y Catarina aplaudió.
- Wooohooo, muy bien maestro del Cello. -  Dijo Catarina.
- No muy bien para mi gusto. - Dijo Anton algo frustrado.
- Pero si lo hiciste excelente. - comentó Catarina.
- No, no lo suficiente. - Dijo Anton algo enojado.
- Pero estuvo bien, lo prometo. - Dijo Catarina
- No, no lo estuvo Clary, estuvo pésimo, debes dejar de mentirme. Vos y yo sabemos que debemos ser los mejores. Es más, ¿por qué no estás practicando?

Actualidad*

- Me sentí terrible e inútil y decidí irme.  Y hoy justo pasa lo del aula. Ese lugar era mágico para mí y para Anton sabes. - Dijo Catarina muy triste.
- Técnicamente sigue siendo suya, piénsalo mor. Sin música no hay baile. Ellos no podrán negarse. - Respondió Gigi.
- Tienes razón. Un día deberías venir. - pidió Catarina a su amiga.
- Esta bien, solo por tí. - Respondió Gigi dándole un abrazo enorme a su mejor amiga.