𝘖𝘮𝘦𝘨𝘢 : ⤷ 𝖧𝗒𝗎𝗇𝗅𝗂𝗑!

╭ ✧ :𝓤𝘯𝘪𝘤𝘰﹒‹𝟹

-"Jinnie, no podré estar contigo durante una semana".

Dijo el australiano con un puchero abrazaba al pelirojo. Hyunjin levantó una ceja en modo de curiosidad, pues era la primera vez que se iban a separar por tantos días, ya que siempre estaban juntos.

-"¿Por qué? ¿Te vas de viaje o algo?" Pregunta el alfa mientras envuelve sus brazos alrededor de la pequeña y delgada cintura del omega. No quería alejarse de su Lixxie, ya que es su mejor amigo.

-"Es que mi mami dijo que llegaría mi celo, y no puedo estar con nadie". Hablo con voz suave e inocente mientras jugaba con el cabello pelirojo de Hyunjin. El Omega solo tiene catorce años, por lo cual aún no le quería explicar que era el celo para supuestamente no corromper su mente.

-"Oh, ya veo" Dijo el alfa sin mucho interés ya que no era algo que le importará. Oh bueno, algo así se veía. Aunque su estomago se revolvió ligeramente y sintió un ligero calor.

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El celo de Felix llegó, y el pequeño Omega estaba boca abajo en su camita. Su piel brillaba debido al sudor de su delgado cuerpo, su rostro estaba sonrojado, sus grandes y redondos ojos de color onix brillaban mucho e incluso estaban lagrimosos.

-"H-Hyunjin... ¡ah~!"

El australiano se retuerce y tiembla mientras solloza por el calor en su vientre, sus pequeñas bragas estaban empapadas con sus fluidos. No dejaba de pensar en su mejor amigo, Hyunjin, lo necesitaba, no entendía porque su cuerpo lo llamaba.

Su redondo y pequeño trasero cubierto solo por sus bragas rositas, estaba elevado mientras su torso delgado estaba presionando el colchón anelaba tener algo en su interior. Sus feromonas de olor a Fresas con chocolate, se esparce por toda la habitación, llamando en un intento tonto a su alfa.

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-"Muchacho, ya le dije que no puede entrar"

Dijo de manera suave la mujer Omega en la puerta mientras trataba que cierto alfa joven no entrará a su casa, más bien, a la habitación de Felix.

-"Hmmh... ¡Joder! quiero ver a Lix" murmuró

el pelirojo de mal humor, extrañaba el olor del pequeño. Necesitaba al Omega, su instinto desea estar con el en Rubio.

A la mierda.

Entrará a verlo, sin importar que la maldita madre de Felix lo detenga, rápidamente se dió vuelta y salió de la casa, fingiendo que se iba, pero rodeo la casa de dos pisos y vío una ventana que estaba abierta, la cual, justo daba al pasillo en el que se encontraba su pequeño gatito.

Al ser un niño habil, sin mucho esfuerzo escaló la pared y entró por la ventana de manera sigilosa. Apenas puso un pie en el suelo del pasillo, sus pupilas se dilataron al olfatear aquel extremadamente dulce olor, ya sabe de quién era.

Gruñó por lo bajo mientras caminaba hacia la puerta del Rubió, escuchando pequeños sollozos de necesidad.

Mientras el Omega sigue boca abajo en su cama con su coñito empapado, sin percatarse de que la puerta fue abierta de manera sigilosa.

El alfa sintió calentarse de inmediato al ver semejante belleza. Su Omega boca abajo en la cama, con el culo alzado, la braguitas mojadas, los ojos cerrados y sus mejillas húmedas por sus lágrimas de dolor y necesidad.

Va a follarlo sin importar que.

Hyunjin cierra la puerta detrás de él y puso seguro, para luego gruñir, lo cual capto la atención del omega. Felix abrió los ojos de inmediato cuando un olor que conocía a la perfección, el cual era uno fuerte con toques de vino.