Caso 1: Mirko

46 10 0
                                    


En la ciudad de Musutafu, la luna se estaba alzando mientras las luces se apagaban ya todos se estaban yendo al mundo de Morfeo, pero el mal nunca duerme y por consistencia el bien tampoco por lo que podemos ver a una mujer con partes de ave escapando a todo lo que puede de la heroína numero 5 Mirko la coneja, la cual estaba pisándole las garras a la mujer pájaro

Mirko: ¿Qué pasa? ¿el canario está asustado? -estando saltando en los postes de luz para tener mayor impulso-

Bird: por favor déjame, ¿no tienes algo mejor que hacer? –trata de volar, pero los nervios se le hacían difícil- solo robe un saco de semillas, tenía hambre

Mirko: ¿Por qué me debería de importar? –salta a un auto estacionado y usando la puerta como apoyo, la rompe en el proceso y dispara la alarma, pero logra impulsar se contra Bird hacia un callejón- te atrape villana

Bird: no, no suéltame –trata de zafarse- no tenía otra opción

Mirko: bueno ya saben lo que dicen "si estás listo para el crimen... -es interrumpida por una tercera voz-

Desconocido: debes estar listo para la condena" –su voz era grave y algo áspera-

Mirko: ¿Quién es? –miraría la oscuridad del callejón, pero solo puede distinguir un leve brillo amarillo- si eres otra villana, muéstrate para que te pate el trasero

Entonces de la oscuridad sale un hombre que se podría describir como robusto además de grande, midiendo 1,90 cm, pero lo más peculiar era su vestimenta que consistía en una camisa blanca debajo de una gabardina café con una corbata roja, portaba guantes negros con un sombrero estilo fedora igualmente café con una cinta roja, pantalones de mezclilla negro con zapatos puntiagudos del mismo color, aunque lo más peculiar del sujeto y que lo separaba de un detective de los 50's era que usaba una máscara que parecía ser un rostro tranquilo y sin expresiones tallada en metal acompañado de unos brillantes ojos que carecían de iris y pupilas, eran solo una esclerótica amarilla que recordaba a un amanecer. Mirko lo estaba viendo de pies a cabeza analizándolo, pero entonces volvió a hablar

Desconocido: yo tengo muchos nombres Expiador, Punisher, Yang, pero me gustaría que se me refiera como el Juez –daba pasos lentos hacia la heroína-

Mirko: tú no eres alguien de la justicia, solo alguien que le falta medicación –ella da un salto para atrás quedando en 4- ¿pero qué?

Juez: Sra. Rumi usted está siendo juzgada –tenía dos tonfas que había sacado de sus mangas-

Mirko: sin dudas te falta un tornillo, pero al menos tendré más diversión que solo esa patética pajarraca –se propulsa contra el enmascarado, pero es golpeada en la mejilla y enviada contra la pared por el impulso- okey...eso dolió un poco

Juez: las heroínas creen que están arriba de la justicia, pero la justicia es imparcial y alcanza a todos por igual –parecía mira el alma de Mirko con sus penetrantes ojos amarillos-

La heroína conejo se levantó de forma rápida queriendo darle una patada, pero el detective desvió el ataque al hacer un movimiento circular con su tonfa izquierda, para darle un golpe ascendente en el mentón con la derecha provocando que la heroína escupa algo de sangre lo que la provoco más y trataría de darle una serie de golpes que para su des fortunio eran bloqueados por aquel hombre hasta que de forma rápida agarro el brazo izquierdo de la heroína y con un fuerte jalón la hizo dar una vuelta para estrellar la contra el suelo, levantando la pierna para darle una patada con el talón que aparte de romperle la nariz haría que chocara contra el suelo y que su cerebro rebote contra el cráneo haciendo que Mirko quedara desorientada y con la visión borrosa

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 13, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

YO SOY LA JUSTICIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora