The Wrong Way To Love

Capítulo 4

Capítulo 4

Alison

Algunas veces desearía tener un novio. Últimamente Joe y Annie se han estado comportando muy cariñosos –si saben a lo que me refiero-. Lo peor de todo es que algunas veces cuando los veo mi corazón se hace pequeñito y me dan ganas de arrojarles agua, pero otras veces me alegra verlos juntos y felices; tengo que hacer algo con estos estúpidos sentimientos bipolares.

─Joe, Annie, paren de besarse o les juro que me sacare los globos oculares con mis propias manos ─les dije por quinta vez.

─No seas aguafiestas Ali, te puedo conseguir un novio, además, ¿Quién dice "globos oculares"? ─me pregunta Joe cuando por fin deja de besarse con Annie.

─Bueno "ojos" y lo del novio, no seas idiota Joe ─me pregunta Joe─. Mejor ya vámonos.

Comenzamos a caminar ya que estábamos en el estacionamiento de la preparatoria. Cuando llevábamos como diez minutos caminando Annie dejo de caminar de repente y nos dijo.

─Saben tengo hambre y apuesto a que ustedes también, ¿qué tal si vamos a comer a alguna parte? ─propuso Annie. Y en verdad tenía razón, prácticamente me moría de hambre y eso era debido a que no salimos a comer en el receso, ya que nos quedamos en la biblioteca terminando algunas tareas atrasadas.

─Bueno vamos a comer a la cafetería que está aquí a dos cuadras ─sugirió Joe.

─Si vamos ─le conteste y Annie asintió.

Caminamos hasta que llegamos a la cafetería, entramos y pedimos tres hamburguesas y tres refrescos.

─ ¿Saben desde hace cuánto no como una hamburguesa? ─nos pregunta Annie.

─Yo me se esa, desde que empezaste con tu fase de vegetariana ─le conteste. Menciono fase ya que Annie tiene muchas facetas. Hace tres meses decidió no comer nada de carne y solo comía comida vegetariana, según ella para mantenerse en forma y no engordar, claro que esta faceta acaba de terminar.

─Bueno, pero gracias a la comida vegetariana baje tres kilos ─me dijo Annie, ella no era gorda, pero tampoco era delgada.

─A mí me gustan tus curvas linda ─le comento Joe a Annie mientras se acercaba y la abrazaba.

─Y a mí me gusta que te gusten mis curvas amor ─le dijo Annie y se acercó –más- para besarlo.

─Ya paren de ser tan melosos por favor ─les suplique.

─Okay, ya vamos a parar de ser tan empalagosos ─me dijo Annie.

─Hey, ¿ese es Jackson? ─pregunto Joe señalando con la cabeza a un chico.

─ ¿Dónde? ─le pregunte.

─En la mesa del fondo, mira despistadamente ─me índico.

Y efectivamente ahí estaba Jackson comiendo un pedazo de pizza mientras leía un libro.

─Pues sí, es él. Saben lo estuve buscando como loca toda la mañana ─les dije.

─ ¿Por qué lo buscabas? ─me pregunto Annie.

─Porque la maestra Piper nos puso en equipo y Jackson no tuvo la decencia de esperarme para ponernos de acuerdo acerca del tema que vamos a investigar ─le conteste un poco enojada.

─ ¿Y por qué no vas y le preguntas? ─me sugirió Joe.

─No, tal vez ni siquiera le agrado.

─Alison, ¿a quién no podrías agradarle? ─me dijo Joe─. Aparte si no vas obtendrás un cinco de calificación en historia, no creo que quieras eso.

─Me convenciste con eso ─le dije y me dirigí a la mesa de Jackson, de todos modos, ¿qué podría salir mal?

J.T.