100 DÍAS PARA OLVIDARTE

Capítulo 20

Debo olvidarte

TYLER

Estos días han sido una locura, entre los trámites de admisión a la universidad y las tareas de la escuela, apenas he tenido tiempo para tomarme un respiro, no he sentido más que la rapidez con la que avanza el tiempo, a un ritmo que no puedo alcanzar. Me siento absorbido por la presión.

Estoy cansado, cansado de sentir presión, en tener demasiadas cosas que pensar y que estas necesiten de mi total atención y energía con la misma urgencia...  estoy agotado. ¿Cuánto tiempo más podré resistir?  Hank ha permanecido al tanto de la situación al ver que deje el voluntariado y me ha brindado su apoyo y sus consejos como un anciano y sabio abuelo. Desearía tener al mío a mi lado, cuidándome y alentándome. ¿Por qué no está aquí? ¿Por qué no ha querido visitarnos desde entonces? ¿Es por mi o por qué siente culpa? 

Quizá solo no quería el drama de la familia y quería vivir una vejez tranquila. Quizá... Sea cual sea la razón, quiero decirle tantas cosas. Quisiera que fuera como antes. 

Sentado en una mesa de la cafetería, apoyo mi cabeza en mis antebrazos, tratando de esconder unas delicadas lágrimas cayendo en la mesita, siendo mi único desahogo. La presión de la semana esta afectándome más de lo que pensé. Cuando vuelvo a la calma, lo único en lo que puedo pensar es en que no encontré ningún sándwich para saciar mi hambre.

- Te ves horrible, West.- dice Ashley sentándose frente a mi.

- Hey, ¿qué tal? 

- ¿Estás bien?

- En realidad me veo mejor de como me siento.

- ¿Quieres hablar de eso?

- Estoy muy cansado, hambriento y malhumorado, no quisiera tener una mala actitud contigo.

- Tengo un paquete de galletas.

Sonrío como un niño y extiendo uno de mis brazos para recibirlo.

- Quisiera tener más cosas claras, en veces siento que corro en un maratón donde llevo mucho tiempo y no se donde está la meta. 

Ashley me mira con atención mientras pareciera que medita cada una de mis palabras.

- ¿Qué no tienes claro?

- Me aceptaron en la universidad de Montreal, me esperan a finales de julio para instalarme.

- Es genial, Tyler ¿Cuál es el problema?

- No se si deba irme, no quiero dejar todo lo que tengo aquí para seguir un sueño absurdo; tengo aquí a mi hermano, mi familia, mis amigos y... no quiero perder nada de eso.

- Los sueños son lo que nos mantienen vivos.- sonrío y ella continua hablando.- Volviendo a lo de tu familia, estoy muy segura de que esperan verte triunfar y estarán anhelando tu regreso.

- Bueno, mi padre estuvo de acuerdo desde el inicio, el apoyo de mi madre me quito un gran peso de encima, en estos días se ha mostrado más comprensiva y nos hemos llevado mejor, mientras mi hermano permanece a mi lado todo lo humanamente posible desde que se enteró que iré a Montreal, es como un chicle. 

- Debe ser lindo tener hermanos.

- Lo es, siempre hemos sido muy cercanos... pero ahora solo pienso en quedarme con él, protegerlo y verlo crecer...

- ¿Te das cuenta que irás a la universidad y que no morirás? Actúas como si fueras a la guerra.

- A lo que quiero llegar es que me esta afectando más de lo que creí el solo pensar en separarme de mi hermano. No se si podré...