En la historia siempre hemos visto sobresalir a los hombres como figuras de carácter y autoridad, esta historia es diferente, es la mía Peito Lilith Adams abogada exitosa y ambiciosa por sobresalir en la profesión gobernada por hombres.
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LILI
Han sido semanas difíciles, entre las terapias y el esfuerzo que hacen todos por hacerme sentir cómoda me han agobiado, sé que sus intenciones son buenas pero me hacen sentir como un bicho raro
Toman decisiones creyendo que así me sentiría mejor pero solo me hacen sentir que no tengo criterio propio, hay veces en las que tengo pesadillas sobre lo ocurrido es lo que más tengo presente como si mi cerebro solo quisiera que recordara esos momentos
Henry me trata con ternura y paciencia, sobre todo lo último, sin embargo, cuando trató de darme un beso yo me aleje asustada, vi el dolor en sus ojos aún cuando sus palabras decían que no me preocupara, que nos daríamos más tiempo, pero considero que no es justo para él esperar por una persona que quizá nunca lo recordaría
—¿Cómo te sientes con tu decisión? – mi terapeuta preguntó
Alec y Ben me convencieron de ir a terapia nuevamente
—Creo que bien – no estaba muy convencida —. Pero siento que es necesario un respiro de este lugar
—Hable con una colega de ahí, ella te atendería con mucho gusto si tu quieres seguir con terapia
—¿No me dará vitaminas?
Sé que era una broma de mal gusto
—No lo hará – me dio una sonrisa ladina —. Me dio un gusto ser tu terapeuta y me da más gusto que vueles por tu propia cuenta para encontrarte a ti misma – me extendió la mano, pero sentí la necesidad de abrazarle a lo que ella correspondió —. Espero verte algún día – le sonreí y salí del consultorio
—¿Listo?
Alec estaba sentado en la sala de espera, no me dejan sola en ningún momento, si no es Henry o David es él quien siempre esta conmigo
—Papá quiero ir a despedirme de él
Aún sentía extraño decirle de esa forma, pero entendí que no fue su culpa el que no estuviera en mi infancia, la terapia que tuvimos juntos estuvo muy fuerte, pero, aun así, necesité más sesiones individuales para procesar la idea de que el era mi padre
—¿Estás segura? Le puedes enviar una carta
Aunque ya no culpaba a Henry de lo que pasó aun no le agradaba del todo
—Papá – le mire reprochante
—Está bien – soltó un suspiro —. Te llevare mi pequeña Peito – me dio un beso en la frente y subimos a su auto
Cuando llegue a la empresa Cavill entre a ver a Aury, comentarle mi decisión y despedirme al igual que Jenna
