Sendero primigenio #2

†Capitulo 160† Análisis curioso

Era curioso... tanto tiempo escapando del calabozo con las más alabadas técnicas que pudo desarrollar.

Y aquel hombre vestido misteriosamente lo había sacado sin la menor de las preocupaciones.

Claro, no faltaban las miradas de odio y asco que le dedicaban todos los habitantes imperiales de la fortaleza, pero en realidad a Elketh no le importaba mucho.

Estaba más enfocado en que el tal Bator lo conducía a toda prisa hacia un sitio que el conocía.

La zona donde había conocido a los únicos amigos en ese lugar, que no era salvajes.

Sorprendentemente para el, ellos no tuvieron ningún problema con su condición de impio ni lo denigraron con burlas o ataques.

En su lugar se sintieron curiosos y hasta lo ayudaron a conseguir comida de calidas y medicamentos a corde a lo que necesitara la gente en los calabozos.

Kaston y Morgan eran sus nombres, una era una excelente guerrera que pertenecía a una familia portadora del elemento tierra.

Mientras que el otro, era un valiente muchacho con el don del fuego, capaz de creer lluvias igneas sobre sus enemigos.

Ambos eran excelentes alumnos de Bator... aunque claro, a comparación del resto de aspirantes Elitezards que habían sobrevivido al encuentro con Devoured.

Quedaban muy por debajo de Beasly y Octavio, dos jóvenes que venían de familias de alta gala en la sociedad imperial.

El propio Octavio era un descendiente aclamado de Imperus, el humano fundador de la nación.

.........

-Has dicho que querías hacerme preguntas...¿Era necesario sacarme del calabozo?-.
Pregunto el pequeño Elketh luego de estar media hora sentado en una habitación.

El misterioso Imperial había estado ocupado revisando algunos libros en los que parecían estar descritos los distintivos dones de la tierra, el fuego, el hielo, y la energía celestial.

...Propias habilidades de sus estudiantes...

-Haci es....-.
Le contesto Bator luego de analizar los progresos de sus jóvenes pupilos.

Después de todo, la nación imperial había creado registros de cada núcleo de poder y habilidades a lo largo de su existencia, para que haci las futuras generaciones pudieran tener un futuro mejor a corde a su desarrollo mágico.

-¿Entonces porque estoy aquí sentado sin ninguna pregunta?-.

-Ya las estás haciendo tu...yo solo estoy ganando algo de tiempo, je-.
El misterioso Imperial levanto un poco la vista, observó unos momentos a Elketh, y luego volvió a sumergirse en sus libros.
-Dime una cosa muchacho, tu también tienes algún don..¿Eres un salvaje mágico?-.

-La palabra salvaje es ofensiva para tu gente...sin embargo, para nuestro estilo de vida es algo cotidiano, y no...
la magia no es algo que este en mi sangre-.

-¿No?...-.
Bator levanto la vista dedicándole una mirada de extrañesa.
-¿Y porque tú padre tiene un collar de contención en el cuello...debe de tener alguna habilidad mágica para que decidan sellarlo ahí... aunque supongo que no debe ser tan-.

Y se callo...como si de repente comprendiera el verdadero motivo por el que Shanoóth no estaba en la torre de extracción.

Elketh soltó una ligera carcajada, divertido por el hecho de aquel imperial había entendido algo importante.

...Su padre...no tenía un gran poder mágico en su interior.

Si no...

-Casi mata a Herjell...tan solo a puñetazos, no necesito habilidades mágicas, porque no las tiene-.
Dijo con seriedad y asombro.

-Haci es.. jaja, es pero algún día ser tan fuerte como el, pero hasta entonces, alguien debe asegurarse de que podamos escapar-.

-¿Y para que querrías hacerlo?, No me lo tomes a mal muchacho... pero en dado caso consigas liberar a los tuyos,
haya afuera no hay mucho por lo que vivir...en serio, serían comida para la aberración que nos mantiene encerrados en la fortaleza-.

-Ya había oído hablar muchas veces de esa cosa...la tal Devoured tiene aterrada a todos tus guardias, jajaja,
debe ser verdaderamente fuerte para que los cobardes imperiales decidan no atacarlo, ¿En serio?, Con todos sus creiditos rondando de aquí para halla, ¿ninguno puede matar al devorador rojo?-.

Bator tan solo sonrió...era claro que el muchacho tan solo quería molestarlo.

Pero sus palabras llenas de inocencia, burla y verdad..tan solo lo divirtieron.

-Hay más cosas en la vida que lanzarte a la muerte...haci que,
toma mi consejo y deja que los tuyos vivan aquí... quizás en un futuro los salvajes y los imperiales puedan llevarse bien-.

-Mientes...no puedes engañarme, mi padre me ah advertido sobre ustedes, cada escape de los calabozos es un regaño para mi... pero se que dice la verdad, ustedes son los verdaderos monstruos, ¡y la cosa que ronda su fortaleza es el verdugo enviado por los dioses!-.

-....Ja... jajaja, quizás tengas razón niño
..nos estan castigando, y no queda más que aceptarlo, pero bueno-.
Bator se inclinó sobre su asiento y suspiro mientras disimuladamente sacaba una pequeña libreta, donde estaban los rostros dibujados en miniatura de todos los prisioneros salvajes.

Los examinó con detenimiento y poco a poco fue relacionando a los que tenían ciertas características.

Había humanos de todo tipo, no por la diferencia en el color de piel, los salvajes eran todos iguales en ese aspecto.

Era solo los patrones de tatuajes en su piel, decoraciónes y tonos de hablar,
las que los diferenciaban de las zonas a las que pertenecían.

Bator sabía muy bien el motivo por el que aquellos pobres desgraciados habían viajado al norte....

Las legiones salvajes estaban buscando nuevas tierras, habían organizado una gran guerra entre ellos, y solo los más fuertes permanecían en su hogar.

Los demás se hiban por vergüenza o en busca de un sendero que los volviera fuertes...

Tan solo que en el mundo... había sitios que era mejor evitar.

Y la nación imperial... era una de las principales.

-Ah, pues bien, Morgan y Kaston no deberían tardar mucho, jaja, se han esforzado mucho por impresionarme, pero sus visitas contigo los han retrasado un poco-.

-.....-.
Elketh no dijo nada, tan solo observó como el imperial seguía ojeando una libreta con mucho detenimiento.

~Interesante...la portadora de la luz impía tiene una hermanita,..sera mejor que Herjell se mantenga lejos de los calabozos, no sería bueno que esa guerrera salvaje se saliera de control~.