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Deneb

-Deneb...

-¿Si mamá?

-¿Te encuentras bien?¿Quieres que te lleve yo a clase?

Iba a negarme pero no serviría de nada, al final acabaría llevándome ella así que me limité a decir:

-Voy a recoger mis cosas.
-De acuerdo, te espero en el coche.

Subí las escaleras para ir a mí habitación y terminar de preparar mi mochila. Llegaba tarde a clase. Concretamente al último día, el gran día en el que nos daban las notas.
Depende de ellas si paso a bachillerato o repito el último curso.
Me cuelgo la mochila sobre el hombro y bajo las escaleras.
Al salir de casa cierro la puerta y bajo las escaleras de mi edificio rápidamente, mamá me espera en el coche.

-¿Todo bien?-me pregunta mamá al subirme al coche.
-Si, solo son los nervios.
-No le des más vueltas, sabes perfectamente que pasas con buena nota.
-Lo sé.
-¿Pero?-contestó ella mirándome fijamente.
-Este curso se me ha hecho poco llevadero mamá.
-No te preocupes porque te quede alguna, no pasa nada.
-Mama...
-Venga, ponte el cinturón que llegamos tarde-cambió de tema rápidamente.

El resto del camino se me hizo muy largo, había un silencio un tanto incómodo en el coche.
Cuándo llegamos a la puerta del instituto me despedí de mamá y entré en el edificio.
Es un instituto bastante grande en realidad.
Al llegar a la puerta de mi clase me encontré con mi mejor amiga, Ada.
Ella ha sido siempre una chica muy charlatana, muy sociable y con muchos amigos, en cambio yo soy muy bastante más callada y mis únicos amigos que tengo son los del grupo.
Al llegar a la altura de Ada ella me sonríe y se le iluminan los ojos y en ese momento sé que tiene algo que contarme.

-Suéltalo ya, parece que vas a explotar-suelto una carcajada y ella pone los ojos en blanco.
-¿Sabes que tengo nuevos vecinos?-murmura mientras entramos en clase.

La profesora de biología todavía no ha llegado así que tomamos asiento y seguimos hablando.

-¿Cómo que vecinos nuevos?-respondo en un tono un poco de sorpresa.
-¡Si! Vive en mi mismo piso-hace una pausa para mirarme- Están haciendo la mudanza todavía.
-Me lo imagino-yo también me e mudado de casa varias veces y es un auténtico coñazo.
-Se llama Ian y tiene nuestra edad.

La voz de la profesora interrumpe nuestra conversación. Ada me mira y yo la miro a ella, con solo eso sabemos que la conversación tendrá lugar luego en el recreo.
Cuando por fin toca el timbre Ada y yo nos disponemos a recoger las cosas e irnos a nuestra siguiente clase.

-¿Le has pedido su número?
-¿Eh?¿A quién debo pedirle el número Deneb?
-A tu vecino idiota.
-Ah-dice ella volviendo a la realidad-no, en realidad fue él quien me pidió el número pero todavía no me ha escrito.
-Vaya,¿nos vemos en el recreo? Es que tengo que ir a clase, no puedo llegar tarde o el profesor García...-empecé a decir, nos dividíamos en algunas clases.
-Si, ya se como es García. Venga después nos vemos, en el banco de siempre,¿no?
-Claro, hasta luego-le lance un beso a modo de despedida y ella hizo como que lo guardaba en el bolsillo.
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Al llegar a casa mamá me espera con la comida recién hecha. Había hecho una tortilla de patatas.

-Uhm...que bien huele-murmure nada más entrar en casa.
-Adivina qué he hecho para comer.
-Tortilla de patatas, la llevo olfateando desde que entré al portal mamá.
-¿Qué tal las notas cariño?-
-Pues... está todo aprobado- dije un poco desanimada.
-No te veo muy entusiasmada por ello,¿qué pasa?
-¿Te acuerdas que te dije que con química iba un poco mal?
-Si...
-Es que está aprobada pero con una nota baja.
-¿Con cuánto?
-Con un seis.
-¡Por dios! Si yo del cinco no subía-dijo mientras se acercaba a darme un abrazo.

Coloque la mesa para tres personas ya que papá está fuera y Lucas ya tiene casa propia.
Entonces solo quedamos mamá, Leo y yo.
Después de comer subí a mí habitación, me tumbé en mi cama y me puse a leer. El libro que estoy leyendo ahora se llama "Antes de diciembre" de Joana Marcus.
No es la primera vez que lo leo pero es que es mi libro favorito, aunque me sigue doliendo muchísimo el final.
Cuando me decidí a mirar el móvil eran casi las seis de la tarde.
Entre a contactos rápidamente y marque el número de Ada, habíamos quedado en que la llamaría a las seis.

-Lo siento muchísimo Ada, no me había fijado en la hora y...
-No te preocupes Deneb, yo tampoco me había dado cuenta de la hora que era-dice algo nerviosa.
-¿Qué estás haciendo?
-Dame un momento Ian, vuelvo enseguida-masculla ella al otro lado de la línea.
-¿Están en casa de Ian?-pregunté entre confusa y sorprendida.
-Shh, no grites que al final te va a oír.
-Ada necesito que me cuentes todo ya.

Dos horas después Ada y yo seguíamos en llamada, me había contado el porqué estaba en casa de Ian, cómo era su casa, su familia, él...
Me contó que tiene un hermano mayor (creo que se llamaba Eiden o algo así) y que también tiene una hermana pequeña llamada Anna que se ha tirado toda la tarde detrás de ella y de Ian para ver qué hacían.

Cuando colgué el teléfono mamá me avisó para bajar a cenar.

Después de cenar me fui directamente a la cama, tenía sueño así que me dormí del tirón.

Lo más bonito de tíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora