21.
“¿Los sirvientes siguen buscando?”
"Sí. “Déjame empujarte un poco más”.
Estuve a punto de decirle que dejara de mirar, pero me detuve.
A menos que Alex saliera solo.
No sé por qué pensé de esa manera. Mientras miraba, los hombros del asistente se pusieron rígidos. Estaba nervioso.
"¿majestad?"
Sería malo sospechar que todos los sirvientes están del lado de la Reina.
“Entonces, ¿te gustaría echar un vistazo a un lugar que aún no he visto? Como era un niño, es posible que se haya perdido. "Nunca sabes."
"Si su Alteza."
El sirviente desapareció.
El sol se estaba poniendo. Se encendieron velas en todas las paredes.
La tenue llama se hizo más brillante a medida que avanzaba por el pasillo hacia el dormitorio.
La brisa de la tarde enfrió mi sudor.
El área cercana al mercado donde robaron a Dot no estaba lejos del castillo. Dicho esto, era una distancia difícil para un niño caminar solo.
¿De verdad saliste de la puerta?
Cuando se pone el sol, la puerta del castillo se cierra. Si había estado planeando escapar del castillo, Alex había elegido bien su momento.
* * *
Mientras estaba lavando, Dot regresó. preguntó desde detrás de la cortina.
"¿Te gustaría asistir al baño, príncipe?"
"está bien. "¿Como lo descubriste?"
Dot habló en voz baja.
“Era un orfanato extraño. Desde fuera parecía una casa encantada y la valla ni siquiera estaba reparada. Los ojos del director también son extraños. Entré diciendo que quería hacer una donación, pero la respuesta no fue buena porque dije que quería tomar una decisión después de ver la habitación en la que se alojaban los niños. Dicen que no puedes entrar porque hay un niño enfermo o algo así. "Si estás enfermo, deberían enviarte al hospital. Les pregunté por qué te mantenían en tu habitación y me dijeron que no podías hacer nada porque era un orfanato pobre".
“¿Has visto a los niños?”
“Dije que miraría. Luego dijeron que era hora de dar un paseo para que no hubiera nadie dentro. Dijo que me traería si esperaba, así que esperé mucho tiempo. Luego, trajeron a dos niños que parecían recién lavados, ambos… … . en algún lugar… … . “¡Parecía sospechoso!”
Me eché a reír sin darme cuenta. Me desperté en la bañera. Después de secarme el cuerpo con una toalla grande, salí y Dot me estaba esperando con una camiseta en la mano.
“¿Qué parece sospechoso?”
“Los ojos, sólo… … .”
"eh. “¿La mirada en tus ojos?”
"No sé."
Dot se sonrojó.
"¿Has explorado los alrededores?"
