Tristeza prohibida, ansiedad y tormento

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Tristeza prohibida,
alegría obligada.
Cumple y sonríe,
ya vale de dramas.

+ De ti, no me lo esperaba.
- ¿De mí?
Ni yo espero algo de mí.
+ Yo ya tampoco.
O mejor dicho,
ya lo espero todo.

Un improvisar sin pausa.
Un plan flexible.
Una caminata sin rumbo.
Una vida sin mapas.
Capítulo tras capítulo,
en pantallas de calma.
Entre miradas y risas,
bajo el cielo de la manta.

De todo eso, nada.

+ Me canso, no sé qué te pasa.
- Ni yo, deben ser las tantas...

Tristeza prohibida,
alegría obligada.
Cumple y sonríe,
pon buena cara.

Esperas y esperas.
Disimulas las ganas,
de explotar sin motivo,
de salirte del tiempo,
de cantar unas nanas
y, en secreto,
dar poemas al alba.

+ ¿A quién?
- Al triste olvido futuro,
al suave delirio constante,
al recuerdo siempre presente,
al pasado reciente atascado,
a la vida que espera radiante.

+ ¿A quién?
- A la dulzura perenne...

Tristeza prohibida,
alegría obligada.
Cumple y sonríe,
no olvides dar gracias.

¡Qué bien se huele!
¡qué buena estampa!
La imagen perfecta,
24/7 a la semana.

+ Qué bien todo ahora.
- Sí (hasta que llegue mañana)
+ ¿Cómo?
- Que qué ganas de que llegue mañana.
+ Ah! Buenas noches y gracias.
- ... de nada.

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Saco las cuentas,
tuve el momento
de cambiar la partida.
No lo hice por miedo.
Ahora no vale
recordar las maneras,
tan malas y feas,
que contra mí se emprendieron.
Sus malas palabras,
sus ojos sin gesto,
años y años
de ansiedad y tormento,
de vidas juntas y vacías,
momentos de daño
que agujerearon mi pecho.
No olvido y pregunto,
empachado de tristeza,
¿ahora no tengo derecho?
A dudar y sentir que no,
que no quiero.
Aunque sea pensarlo...

* No, ahora es injusto.
- ¿Para quién?
* Para quien debes ser su mundo,
su mano, sus brazos, tu entrega.
Quien siempre esperará que escuches,
quien siempre querrá que la protejas.
Culpa no tiene y ahora no puedes,
no intentarlo otra de tantas, tantas y,
aunque duela, tantas veces.
- Pero...
* No hay peros que tengan valor
para pagar al tiempo y sus leyes.
- Solo quiero parar y llorar,
como ella me hizo tantas ocasiones.
* Hazlo, lávate y vuelve...
- ¿Y ya está?
* No, te va a doler, y fuerte.
- No quiero...
* Será difícil, camines el camino que camines.
- Me voy a dormir, ojalá no despierte.

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