𝐀𝐙𝐔𝐑 [𝓣𝓪𝓮𝓚𝓸𝓸𝓴]

12

El omega se removió un poco incómodo en la cama, estaba haciendo frío y el calor que estaba del otro lado de la cama ya no estaba. Él alfa de nuevo se había quedado a dormir y el omega agradecía ya que la llegada del Otoño hacia que las noches fueran muy frías.
Pocos minutos después decidió salir de su dulce sueño ya que la otra persona nunca regreso.

— Tae —abrió los ojos y como lo supuso estaba solo en la cama, miró el reloj y se sorprendió lo temprano que era.

El reloj marcaba las 7:21 am. Es sábado, un fin de semana es justo despertar a las 9 de la mañana, si es posible, más tarde. Escucho unas pisadas en el corredor y luego vio como la puerta se abría, era el alfa con una bandeja, sonrió emocionado cuando esté levantó la vista y lo vio despierto ya.

— Despertaste —hablo el alfa mientras se acercaba.

— No estabas, hace frío —dijo el omega mientras tapaba su cuerpo con las cobijas acolchadas que usaba ahora.

— Te traje el desayuno, para que luego te bañes y ¡irnos a nuestra primera cita! —hablo el alfa mientras acomodaba al otro en la cama para poner la bandeja en sus muslos.

El omega asintió emocionado, llevo un bocado a su boca y sonrió ante el rico sabor. Hoy se iba a poner muy bonito ya que van a hacer un picnic. Agradecía que apenas comenzará el otoño y los días fueran algo cálidos.
Luego de acabar dejó un beso en los labios del alfa y se puso de pie.

— Iré a darme una ducha —Aviso el omega, dejando que él alfa saliera de la habitación con la bandeja vacía.

Luego de lavar sus dientes se dio una relajante ducha con agua caliente, lavo bien su cabello y dio masajes a su pancita, sintió una pequeña patada y soltó un pequeño grito de susto, en menos del minuto tenía al alfa preocupado del otro lado de la puerta.

— Jungkook, ¿Qué a pasado? ¿Todo bien? —hablo alterado.

— Sí, Sí, todo está bien, solo que un bebé se a movido —respondió con lágrimas de alegría—. Ya salgo para que lo toques.

Se ducho rápido y salio con una bata acolchada mientras enredaba una toalla en su cabeza. Miro al alfa y le sonrió, tomo la mano y la puso encima de su panza, cosa que hizo que alguno de sus dos bebés se moviera y diera patadas. El alfa solo llevó su otra mano a su boca, tratando de callar ese grito de emoción.

— Se han movido —susurro el alfa mientras abrazaba al omega y dejaba besitos en toda su cara.

— Mis bebés se han movido —afirmó el omega con una gran sonrisa.

— Me voy a bañar y salimos, este día será el mejor de todos tus días —dejo un último besos en los rosados labios del otro y se aparto, yendo directo al baño.

Se aplico un poco de protector solar y se miró miró espejo, se miraba muy bien, unos Jeans negros holgados, una camiseta blanca y un suéter azul de cierre. No había que aclarar que aquello era del alfa pues se negaba a comprar ropa si luego iba a bajar de peso. Se puso unos Nike cómodos y camino hacia la cocina.

— ¿Dónde vas? —aquella pregunta hizo que él omega volteara hacia el alfa, el cual se encuentra sólo con una toalla en su cintura y secando su cabello con otra.

— A la cocina, a-a arreglar —Tartamudeo Jungkook viendo lo bien que se veía el alfa con su cabello negro un poco largo, trago grueso y se dio la vuelta siguiendo su camino.

Cuando llego a la cocina toma una canasta y comenzó a arreglar las cosas que el alfa había preparado para la ocasión, cuando iba a poner lo último tomo un poco de las fresas picadas. Taehyung no se iba a dar cuenta si faltaban algunas ¿verdad? . Unos poco minutos después escucho los pasos del otro y guardo el tarro que contenía las fresas picadas, sí, contenía, porque el pobre se las había acabado.
Cuando vio al otro sintió a su lobo ahullar emocionado, pues el alfa se veía distinto a como usualmente lo había visto, en esta ocasión se miraba más relajado, la ropa lo hacía ver más tranquilo.