Poder y humildad

Graduación

En una colonia donde apenas se tiene dinero para comer se halla la casa de Alicia. Una colonia en donde la gente se ayuda entre sí. Si a alguien le falta otro le da. Siempre con buenos valores. La casa de Alicia se encuentra en una esquina, la puerta es de metal y han trabajado duro sus padres para tener un techo y paredes de concreto; su madre Sara da el servicio de lavar ropa; su padre Roberto trabaja como chofer de un microbús rentado. No ha sido fácil cuando falta dinero pero Alicia ha trabajado y ahorrado todo lo que puede para lo que se le pida en la preparatoria. Ayer fue el último día de clases y hoy se celebrará ese cierre de ciclo.
El día ha llegado. Alicia dentro de unas horas festejará su graduación. Ha esperado tanto este día que lo ha preparado todo. Se ha quedado muy satisfecha porque ella sabe que le ha ido muy bien en cuanto a la calificación y ha hecho muy buenos amigos. Desde ya hace tiempo ha ahorrado para su vestido. Siempre tiene el dinero medido pero en esta ocasión decidió gastarse un poco más; sus padres le hicieron ver que se lo merecía por su esfuerzo. Ese es el problema. El dinero siempre ha sido medido. Alicia lo entiende. Entiende que el dinero es muy importante pero no más importante que el bienestar con su familia y amigos. Se le ha enseñado que el dinero no lo es todo. Que la humildad está ante todo. Alicia siempre lo recuerda, y por ahora da gracias a Dios por tener una familia maravillosa y una inteligencia asombrosa. Siempre sin mirar a los demás por debajo de ella; sino que siempre ver a todos por igual sin importar su raza, cultura o clase social.
En la colonia le tienen mucho aprecio por su gran inteligencia. Eso es lo que tiene Alicia. Es muy dedicada a sus estudios y siempre saca las mejores calificaciones. Hoy se dará a conocer quién será el mejor promedio de la generación y ella todavía duda de ser ella pero no le interesa, lo que le interesa es todo lo que aprendió y las buenas amistades que se ha ganado. Siempre ha sido un ejemplo a seguir para su hermano Andrés de 9 años.

-Hoy es el último día.- dice Alicia a sus padres Sara y Roberto, unos padres muy dedicados a su familia, que hacen todo por sus hijos.- Gracias. Los amo. No sé cómo agradecerles por todo.
-Hija, sabes que para nosotros lo más importante son ustedes, nuestros hijos. Siempre los apoyaremos en todo, siempre y cuando esté bien.- Sara sonríe. Está muy orgullosa de su hija. La ha visto crecer y ahora con este logro se le ha llenado el corazón de alegría.- Te amamos.
-Yo también los amo, mamá. Por ustedes les juro que trataré de ser mejor. Les pagaré cada una de las cosas que hicieron por mi. Por fin, hoy termino la preparatoria y eso significa que cada vez está más cerca la meta. Gracias por todos sus consejos. Pero esto apenas comienza. Empezaré mi carrera y les aseguro que me irá muy bien.- Alicia, con una gran sonrisa y muy agradecida, se dirige a su cuarto.
-Qué padre por mi hermana. Yo quisiera ser como ella. Así de trabajador.-Dice Andrés que estaba todo el tiempo ahí pero acostado en el suelo. Estaba jugando con sus carros de madera que su padre tenía cuando era un niño.
-Ay, Andrés. Pues deberías de hacer la tarea.- Dice su padre que termina con una pequeña risa ahogada.

Alicia ya está lista. Su familia la espera en la puerta. Ella sale de su cuarto y se dirige hacia la puerta.
-Está bien. Vámonos.-Dice Alicia.
-Pásele, jovencita.- Juega Andrés.
Durante el camino hacia el salón, Alicia no ha parado de pensar sobre la universidad. Quiere luchar por una beca para entrar a la mejor. Pero eso la ha puesto a pensar en que la alejará de sus amigos y como está lejos de su colonia, gastará un poco más en transporte. Ha terminado por olvidarse de eso un poco pues hoy es un día para celebrar y quiere pasarlo muy bien al rededor de toda la gente que quiere.
-¡Qué onda, Alicia!-Israel, su mejor amigo. Ha sido compañero de Alicia desde la infancia. Son de la misma colonia. A Alicia le ha dado una inmensa felicidad verlo hoy en la graduación y rápidamente le da un abrazo.-¡Qué hermosa estás!
-Gracias, Israel. Tú también vienes muy galán.-Dice Alicia riendo.
-¿Vamos a bailar o qué?-Israel le toma las manos y Alicia se sorprende, nunca antes le había tomado las manos.
-¡Sobres, perro!-Así siempre ella se refería a él en forma de juego. Cualquier persona diría que ellos dos son pareja por la forma en que se llevan. Pero no es así.
Después del baile y la cena ha llegado la hora de dar los diplomas a las mejores calificaciones.
-Bienvenidos todos a la ceremonia de graduación de la generación 2012-2015.-Dice el presentador que está en el escenario. Detrás de él sentados frente a una mesa se encuentran cinco personas. Cada una con un puesto muy importante en el ámbito educativo. El director de la institución y otros directores de escuelas muy reconocidas.
-Alicia, te aseguro que te nombrarán. Fuiste la mejor.- Israel le dice con gran seguridad.
-Ay, Israel. No creo.-Le da una sonrisa.-Pero le deseo mucha suerte a los demás compañeros.
Después de las palabras del director y mucha plática ha llegado el momento de dar los diplomas y eso ha puesto muy nerviosa a Alicia.
-Aquí vamos con el tercer lugar. Con un promedio de 95.9 se le da el siguiente diploma a... -El presentador trata de dar emoción a la situación pero al parecer no funciona, todos están muy callados y no les interesa tanto. Alicia tiene nervios puede ser ella o no.- ¡Demian Rojas! Felicidades, Demian. Eres uno de los mejores.
Alicia da un fuerte aplauso. Recuerda a Demian, fue uno de sus amigos en el semestre pasado y se llevaba muy bien con él. Ahora Demian sube al escenario y da unas palabras de agradecimiento.
-Bueno, ahora seguimos con el segundo lugar. Con un promedio de 96.3 se le da el siguiente diploma al alumno llamado... -Alicia aunque no le interesa que su nombre esté en ese diploma, quiere ser ella. Llega un momento en el que ella piensa en que se merece ese premio. Pero al final lo olvida, sabe que hay gente mejor y se lo merece más que ella.-¡Daniela Antonio Martinez! Felicidades, alumna. ¡Qué grandiosa calificación! Sigue así.
Alicia no recuerda a alguien llamada así, pero aún así le desea lo mejor y le aplaude. Entonces le llega a la mente las buenas notas que ha tenido pero no les tomó mucha importancia, no era de anotar todas las que tenía. Para ella pasar el semestre era lo que le importaba y aunque la gente le decía que tenía muy buenas calificaciones nunca se puso a anotar cada una de ellas. Después del agradecimiento de Daniela, el presentador vuelve.
-Finalmente llega el primer lugar. ¡Oh! No lo creo.- El presentado se había sorprendido.- Con un promedio de 100. Asombroso.- Todo el mundo guardó silencio. Era algo muy impresionante. Muy pocos habían logrado el 100 completamente. Alicia estaba segura de que ella no era; había tenido cienes pero también noventas.-Esto es verdaderamente asombroso. El siguiente diploma para el mejor rendimiento escolar. La mejor calificación de toda la generación. Es para...-Todos guardaron aún más silencio.- ¡Alicia Herrera Maldonado!
Alicia no lo creía. Aún por el aplauso y los gritos de todos ella parecía estar sorda. Pensó en que era un sueño. Luchaba por regresar a la realidad pero no sabía que la realidad era esa. Pensó en cómo pudo tener el cien completo. Entonces entró en razón. Había participado en proyectos que daban puntos extras y eso efectivamente la ayudó mucho. Vio a Israel frente a ella, parecía feliz. Estaba diciendo algo pero Alicia no entendía nada. Sintió un cosquilleo en el diafragma. Después sentía que ése cosquilleo recorría su estómago, después su laringe para llegar a su boca y sacar un grito de felicidad que nunca olvidaría. Finalmente estaba frente a toda la gente agradeciéndole por todo. Por lo bueno que le habían enseñado sus padres, por los valores aprendidos, por toda la enseñanza departe de sus maestros y todo el apoyo que tenía de sus amigos. Era uno de los mejores días pero no quería llorar. Sólo sus ojos se cristalizaron y brillaban aún más con la sonrisa plena y verdadera que le daba a toda la gente.
-¡Muchas felicidades, Alicia! Llegarás a donde quieras con tu inteligencia. Eres la mejor de la generación y te mereces esto.- El director de la institución sacó un sobre de su bolsillo. Antes ese sobre lo tenía otra persona sentada detrás de la mesa.
-Gracias, director.-Alicia abrió el sobre y dentro estaba una hoja del departamento de becas. Era una beca para la mejor universidad del país. Era mucha la emoción que sus ojos esta vez si derramaron lágrimas de felicidad.
-Te mereces eso y mucho más, Alicia. Y agradezco al director de esa universidad por haber venido a esta celebración y aceptar que estés becada en su universidad.-Aplaudió el director y se fue a sentar.
Alicia estaba sin palabras. Era el mejor día de su vida. La beca era del 100%. Tenía todo. Tiene la oportunidad de estar en la mejor universidad y crecer profesionalmente.
-Muchas gracias, director. Le prometo que seré mejor. Aprovecharé la oportunidad que me da usted y Dios.-Culmina Alicia, baja del escenario y abraza a sus padres.