Después de tantos tropiezos, ella ha aprendido a encontrar la belleza en cada detalle de sí misma que consideraba una imperfección, a no sacrificar su propio bienestar para complacer a otros.
Aprendió que la autoestima no sólo se construye a base de elogios y validación por parte de los demás, sino que está principalmente en la aceptación, seguridad y paz interna. Hay días en los que se dedica un tiempo a solas para conocerse mejor y consentirse con cosas que le traen felicidad, ya sean actividades físicas, ir de compras, escribir en su diario o leer un libro en un rincón tranquilo de la biblioteca.
Por otro lado, Minho encontró la felicidad en cada pequeño aspecto de la vida, en la amabilidad, en las amistades adecuadas y en colmar de amor a quienes significan mucho para él. Aprendió que no importa cuán fuerte llueva, truene o relampaguee, esa tormenta se acabará en algún momento y el cielo se despejará para que el sol brille. Todo es cuestión de perseverancia. Sigue siendo una persona estricta y a veces gruñona, pero de corazón más dócil.
Ambos han crecido mucho como personas y esos cambios han fortalecido su relación de sobremanera. No obstante, esto no significa que están exentos de altibajos, pero tampoco hay manera fácil de derrumbar su vínculo. Siempre procuran tener una buena comunicación y entenderse los sentimientos del otro.
Ella pensó que el lado romántico de Minho sería sólo una fase que desaparecería con el paso del tiempo, pero se equivocó y aunque él no es de expresar cumplidos verbales (a menos que ella le pida su opinión) o utilizar el «te amo» con frecuencia, basta con notar la manera en que sus ojos la admiran cuando está distraída y como sus orejas enrojecen al ser pillado. Día a día le demuestra de distintas formas cuánto la adora.
Constantemente le trae flores, la lleva a citas en lugares sumamente hermosos, una vez a la semana tienen una especie de velada donde pasan tiempo jugando juegos de mesa, dedicándole atención a sus gatos o viendo películas mientras se acurrucan en el sofá. Cuando Minho llega tarde del trabajo recompensa el tiempo perdido platicándole y acariciándola a la hora de dormir.
Ella no necesita que le reafirme su amor por medio de palabras cuando sus acciones hablan por sí solas. Siempre ha sido así.
Por otra parte, Yuno tuvo que madurar desde el momento en el que su madre enfermó. No era una amenaza para su vida, pero sí requería cuidado constante. Desde entonces procuró dejar su vieja vida, enfocándose en apoyar a su mamá y no dejarla sola para así no seguir los mismos pasos que su padre.
Con respecto a Hwamin, la idea de vengarse cruzó por su mente varias veces. No fue sólo el hecho de que tenían pruebas en su contra lo que la detuvo, puesto que habría resultado en un problema mayor, sino que también sabía que todo lo que hizo estuvo mal y, de cierto modo, se merecía esa arremetida. Arruinó su propia vida. Perdió su trabajo, un lugar al que se acostumbró y donde creó amistades valiosas, y también perdió la oportunidad de mantener una sana conexión con el chico que le gustaba.
Se arrepiente, y ese persistente remordimiento la llena de vergüenza y le impide disculparse formalmente, pues piensa que no merece ser perdonada. Comenzó a desarrollar síntomas leves de depresión, entonces decidió mudarse de vuelta a casa de sus padres y ayudarlos con su pequeño negocio de comida.
En cuanto al resto de los chicos, mantienen sus vidas en orden y a todos les va excelente.
El señor Lee organizó una junta con el director ejecutivo y Minho, en donde le explicó sus intenciones de cederle su puesto a este último. Sabiendo lo sobresaliente que es Minho, el CEO ni siquiera se opuso a la idea, siempre y cuando el señor Lee mantuviera un ojo al pendiente. Siendo así, Lee Ilsung planea retirarse en un mes.
ESTÁS LEYENDO
Grietas del Corazón ; Lee Minho
Fiksi Penggemar¿Un chico malhumorado como él y una chica insoportable como yo llevándose bien? La idea de que pudiéramos congeniar parecía absurda en un principio, pero después de analizar cada fragmento de su corazón me di cuenta de que no es así. De cierto modo...