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Negativo.
Otro maldito negativo.
Rabioso, tiró la prueba de embarazo al basurero, mirando su reflejo en el espejo, y se encontró con su cara haciendo una mueca molesta y de ira.
Era la cuarta prueba de embarazo con resultado negativo y estaba a punto de romper algo debido a la frustración y la pena. ¿Por qué su cuerpo no podía quedar preñado? ¿Por qué no podía darle un bebé a Jake?
Prácticamente hacía el amor con Jake cada noche, dejando que anudara y se corriera en su interior, permitiendo incluso que permaneciera dentro de él para aumentar las probabilidades de un embarazo, pero no había nada. Su cuerpo no respondía. Su omega se negaba a otro bebé por ahora.
Su triste, herido y frágil omega no quería un bebé de Jake, no hasta perdonarlo por completo.
Y Sunghoon tenía miedo de que eso afectara a su relación con el alfa.
Iba a casarse en una semana. Luego vendría la luna de miel. Y después.. ¿después que? Jake iba a querer bebés. Bebés que Sunghoon no podía darle. Bebés que podía buscar en otra persona.
¿Y qué pasaría con él? ¿Con Sunoo?
¿Qué pasaría si a Jake su alfa le decía que quería bebés y buscara a alguien más?
Sunghoon tenía miedo de que eso fuera a ocurrir. Que lo abandonara por alguien que pudiera suplir sus necesidades. Por alguien que no llorara por un engaño ni a veces le hiciera el quite por el sentimiento de traición que le embargaba.
Existían alfas que buscaban más de un omega como pareja, y temía que Jake fuera uno de ellos.
Sunghoon no quería compartir a Jake con nadie, lo quería sólo para él, para nadie más.
Suspiró, sentándose en la tapa del baño, y apoyó su cabeza entre sus manos. Segundos después, la puerta del baño se abrió.
— ¿Papi? ㅡbalbuceó Sunoo con los ojos cerradosㅡ. ¿Ocupao?
Soltó una risa cansada.
— No, no, ven bolita de arroz ㅡmurmuró Sunghoon causando que el bebé abriera los ojos y le sonriera, tambaleándose hacia él con sus manos extendidas.
— Sunnie Sunnie ㅡbalbuceó el bebé apoyándose en las rodillas de Sunghoonㅡ. U-e-mos.
Tomó a Sunoo en brazos, sentándolo en su regazo, y le besó la mejilla regordeta, causando que riera.
— ¿A qué quieres jugar? ㅡpreguntó Sunghoon poniéndose de pie, Sunoo abrazándose a su cuello como un monoㅡ. Mmm... ¿y si vamos a jugar con Jungwon y Riki?
Sunoo lo miró, arrugando los labios.
— No ㅡrefunfuñóㅡ. Tigo no más. Te estanio. Papá abu-i-o.
