All Smite_Cómo caen los poderosos (All Might Villano)

Capitulo 11 Detonación

“¿Estás bien, pequeño luchador?”

Izuku gruñó enojado a través de la mordaza y pateó tan fuerte como pudo. Sintió su pie chocar con el costado de All Smite, pero All Smite solo suspiró y abrazó a Izuku con más fuerza, como si eso lo tranquilizara.

"Lo sé", dijo, acariciando a Izuku. “Lo sé, no te gustan las ataduras. Podemos quitarnos la venda de los ojos y amordazarnos cuando lleguemos, ¿de acuerdo?

Izuku respondió con otra patada a ciegas. No sabía lo que estaba pasando, ni por qué All Smite, Yoichi y los otros villanos lo habían sacado de la bóveda, sólo para atarlo, amordazarlo y vendarle los ojos. Cualquiera de sus preguntas ahogadas fueron silenciadas cuando All Smite lo recogió y lo llevó afuera.

Izuku no se había dado cuenta de cuánto extrañaba estar afuera. Incluso si solo habían pasado unos días desde que se lo llevaron, la última vez que Izuku salió de la casa de los villanos fue durante su intento de escapar por la ventana. Desde entonces lo mantuvieron adentro, encerrado en una bóveda, con puertas y ventanas cerradas para él.

Su emoción de estar fuera de su prisión fue seguida rápidamente por la comprensión de que si podía liberarse de sus ataduras y huir, tendría más posibilidades de perder All Smite y encontrar a alguien que pudiera ayudarlo a regresar a casa. Antes de que pudiera formar algún tipo de plan, lo arrojaron sobre el hombro de All Smite mientras el villano saltaba en el aire.

Izuku recordaba muy vívidamente lo que había sucedido la última vez que estuvo en esta posición y no había dejado de luchar desde entonces. Una parte de él se preguntaba -esperaba- si All Smite se había rendido y había decidido dejar ir a Izuku.

Se dio cuenta de que sus palabras habían llegado a All Smite cuando estaba dentro de la bóveda. Cuanto más tiempo pasaba con el villano, más parecía que All Smite realmente lo veía como su hijo a su manera retorcida. Si había llegado a All Smite, si incluso había llegado a Yoichi, tal vez significaba que iban a dejar que Izuku volviera a casa con su verdadera familia.

Y tal vez mientras soñaba, All Smite se entregaría, Izuku desarrollaría espontáneamente una peculiaridad y los cerdos comenzarían a volar.

¿Era esta la idea de la que estaba hablando Yoichi? ¿Qué estaban planeando para llevar a Izuku afuera después de tener tanto miedo de escapar si salía antes?

"Esto es lindo", la voz de Nana llegó desde el otro lado del viento. “Ha pasado un tiempo desde que hicimos una salida familiar juntos. O desde que estuve en Hosu, en realidad. Nos vamos a divertir muchísimo, pequeño luchador, ya lo verás”.

Izuku hizo un ruido de protesta a través de la mordaza e intentó patear de nuevo, sólo para ser empujado y sobresaltado cuando All Smite finalmente aterrizó y puso a Izuku de pie. La combinación de ataduras, ceguera y desorientación por viajar en los brazos de All Smite hizo que fuera difícil recuperar el equilibrio, e Izuku descubrió que tenía que apoyarse en All Smite sólo para mantenerse en pie. Unas manos gigantescas y familiares lo mantuvieron firme mientras Izuku intentaba recuperar el equilibrio y descubrir su entorno a pesar de la venda en los ojos.

“Tranquilo, mi-tranquilo, pequeño luchador”, lo tranquilizó All Smite. "Nos vamos a encontrar aquí, vamos".

Izuku tropezó cuando All Smite comenzó a guiarlo a alguna parte, un brazo tirando de Izuku y el otro sosteniendo a Izuku y evitando que cayera. Izuku podía escuchar los sonidos de los autos y las voces, pero no había nada cerca. Le recordó el callejón por el que lo habían llevado, donde solo él podía ver lo que les había sucedido a Firefly y sus compinches.

Desde el otro lado de All Smite, podía escuchar la voz de Nana, pero ningún otro conjunto de pasos además de los rápidos pasos de All Smite y los pasos arrastrados de Izuku mientras era medio empujado, medio arrastrado con el villano. ¿Estaba usando su peculiaridad para mantenerse al día con All Smite y escabullirse?