¡¡SALGAMOS!!

XXIII

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Como se esperaba el partido salió bien, ganaron, avanzando a la final que sería en unos meses.

El sol se había puesto, dándole paso a la luna, tenía una luz brillante, y las estrellas se veían claramente, el grupo de amigos salía de las canchas de la escuela.

Ambas parejas, tomadas de la mano.

— Vamos a celebrar — Ni-ki habló entusiasmado

— ¿a donde? — Jay le respondió de manera suave

— A un antro — los tres chicos restantes asintieron felices

— Esperen, Ni-ki y yo aun somos menores de edad — Jungwon respondió con tristeza — no podremos entrar.

— Pero podemos comprar alcohol, ¿verdad nunu? Tú y Jay ya son mayores — el rubio sonrió en grande.

— Piensas que voy a emborrachar a mi novio, no, mejor vamos a mi casa, mis padres no estarán en casa, podemos hacer una pijamada

— Tienes razón suena mucho mejor — Jungwon sonrió — vamos

Los cuatro amigos, con un Ni-ki triste, tomaron camino a casa de Sunoo, donde disfrutarian de esa noche.

Durante el camino pasaron a comprar muchos snacks y bebidas para disfrutar, desde las películas, historias, y de más que tendrían esa noche.

Al llegar a casa de sunoo, se instalaron, como ninguno llevaba pijama, Sunoo les presto algunas

— Juguemos verdad o shot — propuso Ni-ki

— Lo único que tenemos es refrescó y jugo — Jungwon

— ¿quien dijo que solo había jugo? — Ni-ki rió sacando una botella de su mochila

— Ni-ki, ¿de donde sacaste eso?

— Lo compre, parecer mayor ayuda mucho. — Ninguno dijo nada.

Los cuatro chicos se sentaron un mini círculo, viéndose el uno al otro, colocaron una botella vacía frente a ellos, haciéndola girar, poniendo a Sunoo y Jungwon juntos.

— Bien Won, elige

— Verdad

— realmente, ¿desde que momento te empezó a gustar Jay? — una pregunta engañosa, pero fácil de responder

— Desde el día que comimos Ramen fuera de la escuela — El rostro de Jay se torno un poco rojo.

— Sigamos — Esta vez apunto a Jay y Ni-ki

— ¿porqué Sunoo siempre tiene marcas rojas en el cuello? — Ni-ki casi se ahoga con su saliva.

Tomó la botella,  sirviendo un poco y tomándolo.

Cosa que hizo a Jungwon y Jay reír, y aún Sunoo ponerse muy rojo.

— Sigamos — Sunoo hablo bajo, girando la botella, cayendo esta vez en él y Jay, sería su venganza. — Jay... Esa vez que Jungwon llegó marcado hasta en las manos, ¿quién fue el de arriba?

— Yo — respondió como si nada, claro que Jungwon se torno totalmente rojo, mientras Ni-ki rió en silencio.

— Mejor veamos una película — propuso el castaño, antes de que sus amigos y su novio lo avergonzaran más.