Regresaremos [Tensura x Nanatsu No Taizai]

Capítulo 01

「Capítulo 01」

Logré traspasar el portal con Carrera, ella perdió la consciencia debido a las emociones y el daño recibo, así que la abracé con fuerza mientras caemos a gran velocidad con dirección al suelo.

Mis alas dañadas lograron frenar un poco la velocidad de caída, gracias a eso logré desplegar hilos que nos sujeten antes de tocar el suelo.

Por centímetros pero logré evitar el impacto, una gran cantidad de polvo y viento se levantó debido a la velocidad con la que íbamos llegando. Aproveché la situación para moverme sin ser visto por las bestias que sentía a mi alrededor.

—Carrera, ¿Sigues durmiendo? — Pregunté al sentir que se removia en mis brazos, no contesta, debe ser una pesadilla.

Seguí moviéndome sin detenerme durante algunas horas, al salir del bosque llegué a una ciudad, tras pedir indicaciones dí con una posada, ni muy lujosa ni muy básica.

—Buenas tardes, ¿Quiere cenar o alquilar una habitación? — Ofreció amablemente la recepcionista.

—Quiero alquilar una habitación, ¿Aceptan objetos de valor como pago? — Le pregunté a la recepcionista.

—Depende del objeto —

Fingí rebuscar en el bolsillo de mi pantalón y tomé una cadena de oro de mi almacenamiento, la coloqué en el mostrador y la chica lo inspeccionó un poco.

—Una noche con comida incluida, no puedo ofrecer más —

Obviamente está mintiendo, pero estimo que Carrera despertará mañana, es suficiente.

—Está bien, nos quedamos esta noche —

Luego uno de los empleados me guió a la habitación, acosté a Carrera en la cama y la cubrí con las mantas. Me senté en el suelo junto a la cama, alguien puede planear algo y debo proteger a Carrera.

—Será noche de guardia — Murmuré viendo fijamente a la puerta.

『Mañana siguiente』

Me levanté y abrí la puerta, alrededor de 20 cadáveres yacían tirados en el suelo, al parecer la barrera que coloqué fue demasiado para los humanos de este mundo.

—Carrera, Carrera, ¿Puedes escucharme? — La llamé pero no hubo respuesta.

Cargué a mi demonio en mi espalda y salí de la posada. Si tuviera mi espacio imaginario la dejaría descansar allí y no tendría que preocuparme de nada.

Retomé camino mientras pensaba, es difícil aceptar que perdí todo lo que logré construir, quizá la razón de mi tranquilidad es saber que puedo recuperarlo todo.

—Mngh — Se quejó Carrera dormida.

No, definitivamente Carrera es la razón de mi tranquilidad.