Pretend You're There

Capítulo 29: El enfrentamiento con el Zorro

"Sea en ciudades, la muerte no deja de consumir personas"

Lo presentían mutuamente, no podían negarlo era un hecho tangible y casi profético que estarían justo allí, en el momento que sus ojos se cruzaran con una determinación de muerte.

La muerte los abrazaba de maneras tan distintas al chico que no murió, al hombre que no murió del todo.

Es este el principio de un capítulo incompleto y lleno de tachuelas ilegibles de las escasas opciones que ambos se les ofrecieron.

Entonces, ellos crearon sus opciones y pagaron el precio.

Ahora, la pregunta radica en ¿Serán lo suficientemente fuertes para devorar la incompleta e insidiosa relación entre ellos?

El zorro, siempre astuto dió el primer paso.

— Señor Potter, ¿Qué tal en vez de matarnos mutuamente, formamos una alianza?. — El zorro tendió su trampa, o quizás no lo era, tal vez era el vano intento de negar el destino y renunciar a su sometimiento de lo establecido.

Pero, ¿Desde cuándo los grandes depredadores comparten presas? Luchan por el dominio.

Eso es todo.

— No. — Hadrian le contestó con confianza.

Tom no se sorprendió, comprendía a un nivel profundo lo parecidos que son.

— Entonces no está demás tomar lo que me pertenece por adelantado. — Sus ojos rojos brillaron con intenciones.

Hadrian se carcajeó, divertido de lo descarado que es dada la situación es algo irónico.

— Suenas confiado que tendrás mi muerte. — Se burló, arrastrando las palabras.

— Eso y al joven Malfoy, cómo sabrás Harry su familia me sirve y por ende él también lo hará y con gusto le daré su lugar. — Pauso, disfrutando cada palabra. — A mi lado.

Las paredes explotaron, bloques de cemento y escombros se expande por todo el lugar, sin embargo Tom seguía en su mismo lugar, aún poseyendo el cuerpo de su subordinado y Hadrian quiere arrancarle la maldita cabeza.

Con sus ojos sumamente verdes y enseñando los dientes listo para morder.

Rasgar

Y matar.

— Eres demasiado pequeño, y demasiado impotente para lograr tal logro, menos que se fije en una basura de cuarta categoría que perdió por su maldito ego dime Tom, ¿Qué se siente que un niño te quite todo lo que tienes? Lo hice una vez, y créeme lo haré otra vez. — Con paso seguro pero furioso se acercó lo suficiente para que Tom pueda notar el absoluto desprecio en sus ojos.

Y lo condenó.

— Morirás una vez más hoy Tom. — Y sin más lo tocó la cara, quemándolo al acto, escuchó sus gritos de completo dolor le brindaron placer casi igual de bueno que le da su pajarito.

Mientras las cenizas del zorro se reúnen en sus pies, se hiere intencionalmente y coloca cuidadosamente la valiosa encogida lo suficiente para incrustar en sus lentes, mientras la tiñe del mismo color de estás.

Reviso el flujo de la magia, Blaise estaba sonriendo, cómo si estuviera consciente de lo que sucedía y le divirtiera mientras calmadamente sigue haciéndose el desmayado mientras se creaba las heridas, en cambio Neville tiene ese fuego en el ardiente en sus ojos mientras se dirige a buscar a su jefe de casa.

Todo estaba en su lugar.

Tal y cómo predijo su conejita.

Excepto esos ojos que lo miraban directamente cómo si estuviera justo delante de él, pero no había calidez ni alegría por su victoria.

Vacío y blanco desinterés.

De alguna manera, eso dolió más que cualquier herida que se infligió, o que cualquier de las anteriores.

¿Por qué duele?

¿No es suficiente para que voltees a mirarme al menos una vez?

Harry recostado en el desastroso suelo, no podía comprender el rumbo de sus pensamientos y mucho menos porque sentía todo eso.

Era la primera vez que la victoria no sabía cómo siempre.

La amargura lo abarcó por completo.

"Algún día, cuando no te quede nada a tu alrededor lo único que podrás ver será a mí, yo seré el único que vea tus sonrisas y todas tus peculiaridades". Pensaba mientras era llevado a la enfermería.