My angel - Sasuke Uchiha x Oc

Capítulo 3

El sol se ocultaba en el horizonte, la tarde se tornaba de colores y Cyra era guiada por Kakashi a su nuevo hogar en un conjunto de apartamentos mayormente habitados por gente importante para Konoha, como ninjas de alto rango o invitados especiales que necesitan vigilancia constante.

Después de adentrarse al edificio y subir las escaleras, llegaron al 3 piso, donde solo habían dos departamentos, en la cerradura de uno de ellos se encontraban unas llaves que evidentemente eran para la nueva dueña del lugar, la cual estiró la mano y abrió su nuevo hogar.

Lo primero que vió en el recibidor fueron dos pares de pantuflas, unas pequeñas de color rojo, que supuso serían para ella, y otras más grandes para invitados que eran de color azul.

Ambos se colocaron las pantuflas y cruzaron el pequeño pasillo que llevaba a una pequeña sala de estar totalmente equipada con un sofá, mesa de centro, una repisa con varios libros sobre el mundo ninja y una pequeña televisión. Caminó hacia su izquierda donde se encontraba la entrada hacia la cocina, que estaba equipada con todos los electrodomésticos e incluso con comida, platos, vasos y cubiertos.

—Se tomaron la molestia de conseguir todo esto...—murmuró mientras revisaba las repisas con incomodidad.

Kakashi la observaba atentamente recargado en el marco de la puerta, le causaba curiosidad su reacción, a cualquier persona le habría encantado que alguien se tomara el tiempo para cubrir todas sus necesidades y procurara que no le faltara nada, pero extrañamente con Cyra no era así, su rostro reflejaba incomodidad y ganas de devolver todo lo que encontraba a su paso, le generaba ganas de saber más de su pasado y conocer porque reaccionaba de esa manera.

—Todavía te falta ver dónde dormirás, ¿vienes?— dijo señalando el camino con la cabeza cuando la chica volteó a verlo.

Ambos se encaminaron a una puerta detrás del sofá que pertenecía a la única habitación del apartamento, Cyra tomó la perilla y se adentró a su nuevo cuarto. Su vista se posó en la cama matrimonial que estaba frente a ella, caminó y acercó su mano para sentir las suaves sábanas que vestían el colchón, luego volteó a su derecha y notó que había un bello tocador con productos de cuidado personal como cremas de rostro, perfumes, cepillos, maquillaje y accesorios.

Nuevamente volteó a la derecha y visualizó un gran closet llenó de diferentes prendas y zapatos para diferentes ocasiones, al cual se acercó para descubrir que más había dentro. Su exploración se detuvo al sentir una suave brisa en su espalda, y volteando completamente se encontró con una vista hermosa, frente a ella se hallaba un balcón que mostraba a una Konoha nocturna y pacífica.

—¿No cree que es demasiado? Digo, apenas llegué, soy una completa extraña, no creo que alguien como yo debería disfrutar de estos lujos—volteó a ver al peliplata, quien la observaba desde la entrada de la habitación.

—Eres una huésped especial de Konoha, si el Hokage decidió darte todas estas cosas debes aceptarlas.

—Pero esto debió haber costado una fortuna, me siento en deuda—dijo mirando al suelo con preocupación.

—Si te inquieta, puedes pagarlo con servicio a Konoha, estoy seguro que el Hokage jamás te recibirá ni un centavo por todo esto, pero agradecerá tu arduo entrenamiento y apoyo a la aldea—mencionó con una sonrisa, dándose la vuelta para dirigirse hacia la salida, Cyra lo siguió.—Mañana a las 7 am me reuniré con el Hokage para discutir los detalles de tu entrenamiento, y te veré a las 8 am en la entrada del edificio, descansa bien pequeña.—dijo abriendo la puerta y revolviendo el cabello de la pelirroja para posteriormente desaparecer en una nube de polvo.

Con esa salida tan repentina, Cyra quedó unos segundos parada en la entrada mientras sostenía la puerta, ahora los sonidos de la noche llegaban a ella con más claridad, ya no habían risas de los habitantes ni el pequeño chirrido que hacían los zapatos de Kakashi al caminar. La ausencia de la presencia de la gente a su alrededor hizo que por primera vez en el día, se sintiera sola.