Vámonos a marte [JiHan]

.....

Habían pasado dos semanas. No sabíamos si la policía seguía buscando o si nos habían dado por muertos.

—¿Cuándo podremos volver a casa? —preguntó Jeonghan pegándose aún más a mi, lo rodeé con mi brazo, pensando en una respuesta.

—Probablemente nunca.

—Lo siento, Shua.

—No tienes la culpa de nada, Hannie, siempre y cuando estemos juntos podremos formar un nuevo hogar, encontraremos un lugar donde solo seamos tu y yo, donde nadie vaya a buscarnos. Un lugar silencioso y lleno de calma solo para los dos.

Jeonghan no respondió. Sentí su calmada respiración y creí que se había quedado dormido.

—Hay un lugar así —dijo con voz somnolienta—. Marte, nadie nunca ha vivido en marte, es difícil llegar para nosotros, lo será aún más para los humanos.

Pasé mi otro brazo sobre él, atrapándolo en un abrazo. No quería dejarlo ir.

—Sería genial dejar la tierra, olvidar todos nuestros problemas, pero no podemos ir a Marte, Hannie, no tenemos como.

—Hay una forma, mi nave sigue enterrada en el patio de tu casa.

—¿Todavía funciona? —pregunté incrédulo, creí que se había dañado con la colisión.

—Seguramente.

—¿Cuándo podríamos intentarlo?

No hubo respuesta. Jeonghan se encontraba durmiendo plácidamente, su rostro lleno de calma. Me gustaría verlo siempre así. No estaba seguro sobre ir a marte, pero si en ese planeta podría verle con esa expresión todos los días estaría dispuesto a hacerlo.