Ya te perdone

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Luke Alvez, había toda su vida trabajando para conseguir lo que se propuso cuando era un niño tanto que nunca se preocupo por su vida amorosa. Su única compañía era su perra Rose, despues de unirse a la UAC por fin supo lo que era una familia, luego de tantos años siendo el contra el mundo.

Un día cuando paseaba por el parque Rose salió corriendo, cuando por fin la alcanzo estaba dejándose acariciar por una bella mujer. La forma que se conocieron parecía sacada de una película romántica pero fue una gran historia.

Luego de tres años de relación, se casaron y casi un año despues recibieron a una hermosa bebé a la cual llamaron Melany, era la luz de los ojos de Luke y Aurora.

Dos años más tarde llego Lucas, ese pequeño llego para terminar de completar el rompecabezas de su vida o así lo explicaba Luke. Amaba volver a su casa y ver el pequeño caos que se formaba cada noche antes de que los niños se fueran a dormir. El tomaba a su pequeño de la cintura y lo llevaba "volando" a la cama y luego se colocaba en cuatro para que su princesa pudiera montar a su corcel el cual la llevaba a su cama. Cuando por fin estaban dormidos iba a su habitación y conversaba con su esposa hasta que el sueño los vencia.

Nada es perfecto y eterno, cuando Melany tenía cinco años y Lucas tres, Luke fue llamado de nuevo al ejercito, no sabía cuando volvería y si volvería con  vida, así que cuando se despidió de su familia sintió que sería la ultima vez.

Tardo dos años en volver, por un lado estaba feliz de volver sano y salvo a su casa, pero por otro sabia que no era el mismo que se fue: la guerra lo cambio, pero no sabia cuanto.

En cuanto sus hijos lo vieron se abalanzaron sobre él y por poco lo tumban, pero el sentirlos entre sus brazos, sentir su olor y su respiración, le daba la paz que por mucho tiempo no sintió.

Agradeció que sus amigos de la UAC, no fueran por él, deseaba estar solo con su familia. Necesitaba sentirse en casa de nuevo...

Luego de pasar varias horas con sus hijos, por fin pudo hablar con su esposa...

Tienen más energía de la que recuerdo - dijo Luke riendo mientras se sentaba en el sofá 

Están emocionados por tenerte en casa igual que yo - dijo Aurora riendo - pero si es cierto, para que con cada año que pasa más energía tienen.

Eso parece - dijo Luke riendo y luego su expresión cambio - hay algo de lo que debemos hablar.

De que se trata? - dijo Aurora mirándolo

Lo que viví fue peor de lo que te decía en las videollamadas o en las cartas, no podía decirte mucho porque tal vez los niños escuchaban y no quería que se angustiaran - dijo Luke sin mirarla 

Siempre lo supe - dijo Aurora sonriendo levemente mientras le consentía el rostro 

El asunto es que necesito terapia y bastante - dijo Luke mirandola - estuvimos dos noches en un hotel en Londres y fueron un infierno... no quiero que tengan que vivir eso.

Y que planeas hacer? - dijo Aurora seriamente 

En unas horas llega Tara por mi - dijo Luke seriamente - me va a llevar a un instituto donde me podrán ayudar, pasare la noches allá y antes de que los niños despierten estaré aquí, por una semana será así mientras me evalúan. De día puedo estar tranquilo... de noche es...

De acuerdo pero por favor no me ocultes nada - dijo Aurora tranquilamente - si en el día la estas pasando mal dímelo, y vemos que hacer.

Pero las cosas no mejoraron, solo fueron de mal en peor. Los primeros meses fueron fáciles de sobre llevar con las terapias pero un día en medio de un caso un ruido desato un recuerdo de la guerra y Luke colapso.

ONE - SHOTS CRIMINAL MINDSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora