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Las indirectas muy directas
La familia de Levi estaba contenta rebosando de alegría debido a las últimas noticias que habían recibido, la castaña la cual llegaba tarde entro y directamente abrazo a su querido padre.
- Hay padre mío, no sabes lo feliz que me pone saber que Dios te eligió.
El patriarca reía ante los abrazos y mismos de su única hija, luego la separó de el mirandola seriamente.
- ¿Cuando pensabas decirme que Dios te escogió cuando eras una niña?
La mandíbula de los hermanos de la chica se abrieron por completa sorpresa, Miriam y Jocabed miraban confundidas a la joven mientras que Amram y Eliseba mantenían una actitud calmada.
- Papi era un secreto entre Dios y yo...solo espere el momento correcto, perdóname es que en tu actitud de hombre malo enojado con el señor no podía comentártelo.
- ¿Oh con que parecía un niño haciendo rabieta eh?
Aarón le hizo cosquillas a su hija haciendo que los demás también rieran ante tal escena.
- Realmente lo lamento papá...
- ¿Lamentar que? - Tomo su mejilla ambos viéndose de frente - ¿Ser la escogida del señor...que el haya visto todo lo bueno que eres? Eso....
Las lágrimas salían del más mayor haciendo que abrace a su hija uniéndose Eliseba.
- Genial ahora papá está llorando igual que cuando naciste Mical - Dijo Nadab con burla provocando la risa de los presentes y que su progenitor lo mirara mal.
- Mi pequeña hija, la escogida de Dios estoy orgullosa pequeña - Hablo su progenitora dejando un beso en su frente.
- Mi princesa...eres todo un orgullo para tu viejo padre...Dios te guíe siempre por sus caminos - Beso su cabeza con dulzura antes que su tono se vuelva serio - Y es por esa razón que ahora debes actuar con prudencia y alejarte de es muchacho prométemeló.
Los bellos ojos celestes de la castaña se quisieron llenar de lágrimas mientras el corazón se le hundía por completo, nunca pensó en como Dios veía su relación con Jairo, pero su padre tenía razón.
- Lo prometo Padre..- El volvió a abrazar a su pequeña princesa, imaginando lo difícil de su decisión.
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