Mariposa Omega en la Web Alphas˗ˏˋ ♡ ˎˊ˗

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❁El único viaje de chicas❁

Resumen:Vas a ver a Shirley, preocupado de que pueda enfermarse. Pero Honey es de quien deberías preocuparte.

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Mientras caminaba hacia la puerta, vi dos Arañas, Machi y Pakunoda. Al parecer, era su turno de mirarme.

No pude evitar detenerme por un segundo.

Si bien me alegré de que Phinks y Feitan no fueran a vigilarme, Machi y Pakunoda eran dos problemas completamente diferentes.

Machi podría transmutar su aura en hilos. Por lo que me mostraron mis visiones, eran lo suficientemente fuertes como para cortar carne o atar a alguien. Fruncí el ceño ante el pensamiento, sería mejor que ella no estuviera allí para ponerme la correa.

Luego estaba Pakunoda. Si bien no intimidaba como las arañas más musculosas, su poder era aterrador. Si me tocaba y me hacía una pregunta, podía leer mi memoria. Mis secretos, mis esperanzas, mis sueños, mi vida, yo mismo... Todo sería más difícil de proteger cerca de Pakunoda.

¿Arriesgo mis secretos para salir a ver a Shirley o volver y ver a Chrollo en la iglesia?

Suspiré, no podía soportar la idea de que los niños sufrieran y estaba cansado de ver a Chrollo. Y sabía que no podía evitar a los otros miembros del grupo por mucho tiempo.

Respiré hondo, conté hasta diez y luego me obligué a caminar hacia adelante.

Me vieron acercarme.

"¿Llendo a algún lugar?" -Preguntó Machi.

Reduje la velocidad hasta detenerme. "Me voy a la ciudad", simplemente dije.

"Iremos contigo", dijo Pakunoda.

"Me lo imaginé", dije. Pasé junto a ellos y luego empezaron a caminar a mi lado. Intenté ignorarlos; Sólo iba a ver a Shirley para ver cómo estaba. Después de eso, regresaría a la iglesia. Con suerte, para entonces Chrollo se habría ido y yo me habría quedado sola para pensar.

Dios, daría cualquier cosa por relajarme y pensar, sin que nadie me respire en la nuca.

"Tienes-..." mi reflejo se activó cuando sentí que Pakunoda tocaba mi hombro. Aparté su mano de un manotazo y luego retrocedí unos pasos, mi aura ardía a mi alrededor en defensa. Ambos me miraron con sorpresa.

"No me toques", siseé.

"Cálmate", Machi se cruzó de brazos, "No íbamos a intentar nada. Te sugiero que calmes tu aura antes de querer problemas".

Me puse derecho y calmé a mi Ren. Miré a Pakunoda antes de responder: "No me toques y no habrá problemas".

Se lo dije a ambos, pero claramente estaba dirigido a Pakunoda. Su habilidad sólo podía activarse a través del tacto. Esa era la similitud entre su habilidad y la mía y la debilidad. Sin contacto, sin información.

Continué hacia la ciudad con Pakunoda y Machi siguiéndome.

Una vez que pasamos por el camino de basura, traté de quedarme a un lado, pero con dos Arañas detrás de mí, era difícil para la gente no mirar.