Renacer: una nueva oportunidad en el mundo mágico

Toujurs Pur, Toujurs Ensemble

Después que sus hijos se fueron a Hogwarts, Regulus le pidió a Lucius hablar un momento con él.

Lucius acordó hablar con él en la tarde cuando ambos estén libres

Regresaron a casa. Regulus se despidió de su esposa, que ya se iba a su trabajo como medimaga en San Mungo. Hace años, antes que naciera Madara. Orion, Walburga y Regulus insistieron que no tenía porque trabajar ya que ahora era la dama de la noble casa Black, pero a Nymeria le encantaba su trabajo, no lo hacía por el dinero, le gustaba ayudar a las personas y vaya que era buena en eso. Ese era uno de los motivos porque se enamoró de ella.

Se despidió de Eris, que estaba estudiando junto a su abuelo Orion las bases de la transformación.

Se acercó a la chimenea y tomando unos polvos flu exclamó: "puerto Immingham"

Apareció en una oficina. Era un lugar acogedor. Tenía una alfombra clara, un escritorio de madera de roble y algunas plantas adornando los alrededores. Se acercó por la ventana observando a lo lejos el mar lleno de grandes barcos que entraban y salían  del puerto

Espero un rato hasta que llegó un hombre en traje. Este lo saludo educadamente

"Señor Black, es un placer tenerlo aquí".

"Buenos días señor Burton, veo que todo va bien por aquí". Dijo Regulus con tono cortes

"Así es, supongo que viene a ver las estadísticas y estado de resultados de  este periodo".

"Así es".

Dicho esto Burton sacó unos informes de su escritorio y se los entregó.

"Ya veo, este periodo hemos tenido muy buenos ingresos."

"Así es señor, gracias a sus ideas hemos tomado la delantera frente a otras empresas, nuestros pasivos se redujeron en un 48 por ciento, mientras que nuestras ganancias subieron un 67 por ciento"

Regulus habló algunas cosas triviales antes de despedirse y retirarse saliendo por la puerta, espero hasta entrar a una zona vacía de la compañía desapareciendo

Hace unos años Regulus pensó que era contraproducente manejar sólo negocios mágicos, pero conociendo a sus padres decidió no contarles, después de todo ellos estaban muy ocupados con el Wizengamot. Así que expandió los negocios familiares al Mercado muggle

Regulus compró un tercio de una gran empresa pesquera en Inglaterra y con un poco de ayuda mágica por su parte, la empresa empezó a crecer enormemente dominando el mercado

Regulus apareció en el vestíbulo del ministerio de magia. Mientras caminaba fue saludado por algunos trabajadores y civiles que pasaban

Subió al ascensor y presionó el botón que lo llevaría a ver al ministro de magia, Cornelius Fudge

Cuando llegó hablo con la
Secretaria.

"Buenas tardes vengo a ver al ministro". Dijo de manera cordial

"Ah si, muy buenas tardes señor Black, el ministro lo está esperando". Dijo la secretaría amablemente. Era una mujer relativamente mayor, tenía cabello castaño claro y ojos verdes

Regulus abrió la puerta. El ministro Cornelius Fudge lo recibió con una amplia sonrisa levantándose de su asiento

"Señor Black, que bueno verlo". Dijo extendiéndole la mano

"Muffliato". Dijo el ministro moviendo su varita, causando que nadie pueda escuchar lo que estaban por hablar

Regulus le estrechó la mano y con una sonrisa sutil habló.