𝐁𝐑𝐎𝐎𝐊𝐋𝐘𝐍 𝐁𝐀𝐁𝐘 - 𝒿𝓊𝒿𝓊𝓉𝓈𝓊 𝒦𝒶𝒾𝓈ℯ𝓃

19🌨️

No se que es peor, el hecho de que megumi y nanami estuvieran perdidos y posiblemente están grevemente heridos, o que sukuna me haya dicho eso.

Las náuseas me invaden.

Sukuna era conocido no solo por las muchas cosas crueles que hizo en el pasado con gente inocente, también por los actos tan inhumanos que le llego hacer a las mujeres de aldeas... Comparadas con las situaciones actuales sobre ellas... No hay quien se salve.

Si quiero evitar que el le haga daño a itadori y a todos los que lo rodean, debo evitar el demostrar que le tengo miedo...

— te dare cinco minutos para ir a ayudar al otro mocoso — hablo con un tono de orden.

— ¿ah?, ¿fushiguro? — levanto una ceja, ¿por que lo quería a él?

La maldición estiró los brazos, para después chocar los puños y tronar sus dedos.

— en unos minutos shibuya será un mar de sangre — sus cuatro hijos me miraron fijamente — y tu al estar cerca del nivel de aquel que se hacer llamar el hechicero más fuerte, y ser la segunda encargada de los estudiantes.... Si algo malos les llegará a suceder, tu serás la responsable de eso.

Ante aquellas palabras me quedo atónita.

Era.... Verdad lo que dice.

Seguramente después de todo el daño que ocasionaron las maldiciones... Y que hará sukuna, los altos mandos me vean a mi como responsable de todo esto... Como satoru no esta aquí... Seré yo la que resivira un castigo.

— toma mi oferta como algo generoso. Si en esos cinco minutos no logras salvar a la mayor cantidad de personas, y al niño — se pone delante de mi, y con su voz profunda dice—  Entonces no dudaré en matarte.

No digo nada.

¡¿Como quiere que haga eso en cinco minutos ?!

Antes de responder, la voz de alguien sumamente molesta llama por el nombre de la maldición frente a mi.

— ¡¡MALDITO!! — era la maldición con cabeza de volcan. Quien con furia arremete contra sukuna.

— cinco minutos — levanta un dedo.

El tiempo corre.

Sin esperar a más corro por toda shibuya en busca de mis estudiantes.

— no logro percibir la energía maldita de megumi — miro a los lados — pero si de... ¡Panda!

Mientras corro por los edificios, observó con mucha atención si no quedo una persona cerca. Agradezco a inumaki por usar su ritual para alejar a los no hechiceros de aquí... Pero nada garantiza que el  vaya por ellos.

Me detengo de golpe al ver a una persona conocida.

— ¡kusakabe! — llamo su atención, pese a estar lejos de él, logra escucharme.

Abre los ojos en par.

— ¡¿shimizu-san?!

Antes de ir con el, noto que hay más personas. Claramente no son aliados, además de que reconozco a una mujer de pelo rosa  y un hombre con la mitad del rostro tapado.

Los vi junto con geto el año pasado.

— t-tu.. — susurra la mujer, su expresión de sorpresa pasa a una de enojo — ¡olvídense de ellos! Es ella la amiga de satoru gojo, y una hechicera de categoría especial, además mato al maestro geto, ¡matenla!