[Cap. 10]

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Me desperté a eso de las once y media de la mañana, apenas abrí los ojos, noté cómo el guardia dorado seguía durmiendo conmigo, lo cuál me preocupó dado a que me dijo que debía hacer una misión, lo agité delicadamente y le susurré bien bajito — Goldie... Despiertese... —. Él no respondió y se aferró a mí, ocultando su rostro en mi cuello a la vez que daba un jadeo debajo de mi oído, mis mejillas se pusieron rojas y cerré los ojos, bajé mis manos hasta la cintura de mi contrario y traté de empujarlo así poder despertarlo. Aunque no se separó ni un poquito, en comparación con el guardia dorado, mi fuerza contra él se sentiría como un cosquilleo o algo parecido.

Sus caderas estaban pegadas a las mías y eso me ponía un poco... Bueno, bastante nervioso. Si seguía así de aferrado a mí, la colonia de él quedaría impresa en mi ropa y eso podría levantar sospechas e incluso se podría malinterpretar, quizás que si los guardias pasaban al lado mío y notaban que olía igual que el guardia dorado, pensarían que pasamos la noche juntos haciendo... Ya saben.

Mi cama era una de las últimas de la enfermería, por lo que mi camilla estaba pegada a la pared y colmo mío que yo estaba durmiendo del lado del muro, con cuidado me traté de levantar, pero no pude, por lo que me tuve que medio sentar por encima de mi contrario para poder alejarme de él o algo. El rubio ya estaba despierto y me miraba con agotamiento, se le notaba en los ojos que no dormía hace años,sinceramente, parece drogadicto de las enormes ojeras que tiene, me hace acordar al tío Lucas de los locos Addams, sus brazos seguían rodeando mi cadera y yo ya estaba encima de él en mi intento de salir de ahí para comer algo... Y alejarme, claro.

La puerta de entrada a la sala se abrió y se oyó como un plato caía al suelo y por obvias razones se hizo añicos, maldigo con toda mi alma a la enfermera que entró y me vio encima del guardia dorado... (O posiblemente al ver al guardia dorado sin su máscara), de seguro mal pensó lo que vio, mi mirada estaba fija en la mujer, pude sentir mis mejillas arder otra vez y mis ojos estaban abiertos como platos.

Mi contrario seguía debajo mío y apretando mi cadera con sus brazos, ¿Acaso el universo conspiraba en mi contra y me hacía pasar esas cosas tan vergonzosas? Bajé la mirada para ver al rubio y noté que su rostro estaba tan rojo como un tomate, recordando a mi hermana Amity cuando se enojaba...

— No es lo que parece... — Dijimos los dos al mismo tiempo y volvimos nuestras miradas a la enfermera.

—Todos dijeron lo mismo, se le ve mejor a Joven Edric... Lo dejo solo con su novio, y vayan a hacer esas cosas a otro lado... No es un lugar adecuado para tener relaciones sexuales.

Una punzada atravesó mi pecho y sentí un mar de emociones con todo lo que dijo —No me importa, yo follaré con él aquí, después de todo soy el guardia dorado —exclamó él y dejó de abrazarme para posar sus manos en mis muslos, cuando lo vi a los ojos me guiñó un ojo que me indicó que estaba bromeando con que le siga la corriente.

— Titán santo... — Murmuró la enfermera, con una mano se cubrió los ojos y con la otra hizo un círculo en el aire para juntar los trozos de vidrio roto y tirarlos a un tacho de basura cercano, el guardia dorado comenzaría a juntar su pelvis contra mí de una manera amistosa y yo le seguí la corriente, iniciando a frotarme contra él y reír un tanto nervioso, la mujer lo hizo todo y luego de esto cerró una cortina que estaba en mi cama.
Cuando escuchamos que la enfermera se fue, inmediatamente le pusimos fin a nuestra broma y nos miramos a los ojos, pude notar en sus ojos que deseaba que el momento siga, pero no podía aceptarlo, aun me estoy recuperando de la muerte de mi expareja y no puedo quedar como un chico "fácil" tan así, tampoco me imaginaba teniendo relaciones sexuales con una persona que entonces pensaba que era mi enemigo.

Soltó mi cintura y yo me incorporé, lo miré de reojo y decidí marcharme sin más, dejándolo en la enfermería tumbado e ignorando que aún estaba con las vendas...

LAS VENDAS.

Decidí quitarlas a medida que regresaba a mi habitación y a la par que llegué a mi cuarto, mi pálido brazo solo tenía unas cicatrices pequeñas, parece que la poción que me dio el guardia dorado me sirvió.

Tiré las vendas a la basura y me senté en una silla de madera que eran de esas típicas que tenían las personas ancianas, fuera de broma esa silla me ayudó bastante para calmarme en momentos de ansiedad o cosas así, me volví a incorporar y fui a un toca discos que tenía por ahí, la soplé y de repente se vio una nube de polvo en la dirección que soplé, no la usaba hace rato y ahora iba a escuchar un poco.

Se puso la canción que oí con Jerbo la última vez, con la que tuvimos ese pequeño momento íntimo que fue interrumpido por el guardia dorado, cerrando los ojos y el recuerdo que quería olvidar no salía de mi mente, fruncí el entrecejo mientras volvía a abrir los ojos, saqué el disco y lo volví a guardar dentro de su caja correspondiente.

Un cuadrado plano del tamaño de mi antebrazo estaba sobre mi escritorio que no había visto anteriormente, levanté las cejas y me deslicé hacia ese lugar, sostuve la caja de aparentemente un disco entre mis manos y quité el envoltorio de regalo, viendo que se trataba de uno de los discos que más me gustaba; la mitad de arriba era amarillo/dorado, y la mitad de abajo era naranja algo pastel y en el centro había un círculo pequeño color blanco, en una esquina decía "Cerati" en letras negras.

No lo puedo creer. El álbum que más buscaba y que no encontraba al ser el más conocido en las Islas Hirvientes estaba en mis manos, lo volteé y había una carta blanca con una letra en cursiva.

"Ví que tenías la mayoría de discos de Gustavo Cerati, pero que te faltaba el de amor amarillo así que me encargué de buscártelo". ¡Disfrútalo mucho! ♡

Eso decía el sobre, lo saqué algo confundido y lo hice un bollo. ¿Alguien entró en mi habitación el día que estuve en la enfermería y se dispuso a husmear mis discos? Por una parte es raro, pero por otra lo agradezco, ya que no lo encontraba en ningún lado y me moría de ansias por tenerlo y oírlo, saqué cuidadosamente el disco y lo puse en el aparato correspondiente, la canción no dudó en hacerse oír...

¿Quién entró a mi habitación?

Me volví a cuestionar, pero una respuesta se hizo presente en mi mente, ese chico que me salvó cuando me vió al borde de la muerte por mis autolesiones, agarré las vendas y las estiré, recordé que había escrito y leí el mensaje de las vendas.

No era la misma letra, eso era extraño, la letra de las dos cartas que recibí (el poema y el disco), sobé mi cabeza, decidí no pensar en eso y concentrarme en el tema que andaba sonando "Amor amarillo".

⌇˚.༄ #◞ . ‧₊◜·°˖˚♡ !! ✧ 🔞⌇# α ₊ ୭̥⋆*。 › ˎˊ˗

•[★]• Me gusta el Hc d q a Edric le encanta todo lo que es Rock Argentino (Cmo callejeros, soda stereo, pescado rabioso, enanitos verdes y etc) y q le encanta demasiado oír Cerati y Soda.

•[★]• No sé si recuerdan que en un episodio de la temporada 2 se avisaba cmo el coso de los libros de la bueba bruja q se infiltraban o algo así.

•[★]• A continuación, el álbum que le regalan a Ed

¿Golden Guard..?// GoldricDonde viven las historias. Descúbrelo ahora