"Verle por primera vez"
No te das cuenta, no tienes idea, ni siquiera una mínima pista de que podrías conocer a una de las personas que será de las más importantes que tendrás en tu vida, solo vas por la vida conociendo persona tras persona sin saber que habrá una que será la indicada, la que llegara a cambiarte mucho la vida, la que te dará las peores lecciones de vida o los momentos más increíbles, no lo sabes, y eso hace que al final sea aún más especial para ti, porque todo sucede como si nada, espontáneamente.
Llegó el momento de verse a los ojos, recibo un abrazo, y aparece entonces la primera sonrisa, esa sonrisa de la cual te enamoraras con total profundidad.
En este momento detesto el hecho de casi no recordar lo que hablamos en esa primera conversación, quizá música, asuntos del instituto, detalles de la práctica, pero también la primera señal, una que no siempre tendrás la oportunidad de saberla, es la señal de la sinceridad, que llegan a decirte quienes son y que podría llegar a pasar, esa la cual estoy segura tomarías y elegirías si te favorece estar con alguien o no; de repente salen de su boca las siguientes palabras...
"Soy manipulador, mentiroso y egoísta", es increíble ahora pensar que esas palabras salieron la primera vez al vernos, como fui tan tonta en no creer lo que decía, quizá solo pensé que se trataba de una broma, quizá era ignorante en el tema y por eso no lo tome enserio, esos adjetivos junto con otros peores debieron ser la señal de bandera roja que necesitaría cualquiera para justo en ese instante irse y no volver.
Pero no causo nada, realmente eso no me preocupo en lo absoluto, básicamente me describió al tipo de persona que nadie desearía tener en su vida, y era extraño, porque quería cualquier otra cosa, menos dejarle o irme de ese lugar.
No hay explicación racional para ello, solo quería conocerlo más, saber si aquello era así, saber el porqué, llegar a conocerlo tan bien que pudiera llegar a conocer la causa de sus defectos y cualidades.
Los minutos pasaron volando, incluso antes de llegar pensé que me aburriría e inventaría algún pretexto para irme de ahí, pero no fue así, la charla continuaba y cada vez era mejor.
Paso una persona, un familiar de él y en ese momento me sorprendió el hecho de que me presentase como su novia, fue extraño, aun no me lo había preguntado, pero tampoco lo negaría, ¿qué clase de persona seria al dejarlo mal frente a su familiar?
Me encanta ser así, como en los tiempos de antes se tenía que hacer "la pregunta" si o si para poder formalizar o hacer oficial algo, y luego de que esta persona se marchara la hizo.
Después de haber dicho mi nombre completo continuó con el "¿Quiere ser mi novia?", me tarde unos segundos haciendo tiempo para asimilar que saldría de mi soltería, que ahora tendría que estar con alguien, darle prioridad, contarle sobre mi vida y el sobre la suya, estar pendiente de él, darle amor y atención, conocerlo y darle lo mejor, no fue mucho tiempo hasta que dije que sí.
Pero el beso que usualmente se da en esas situaciones no llegó, la inocencia aún estaba en mí, me daba mucha vergüenza besar a alguien para ese momento, estaba nerviosa, sabía que tenía que hacerlo pero los nervios invadían cada partícula de mi cuerpo así que solo continúe charlando.
Llego uno de los momentos más divertidos, él ya se tenía que marchar, por mi parte podría haber seguido hablando, el suele conversar de temas muy interesantes, sin embargo, por esa noche ya habíamos hablado lo necesario así que quise despedirme con un beso, pero era de esperarse que el sería tan espontaneo e impredecible como para aprovechar ese momento, y al acercarse a mí para "abrazarme" beso mis labios.
Fue rápido, y me dejo estupefacta por unos segundos, solo dijo "adiós" y se marchó.
¿Me gusto?, no sé, no lo esperaba, pero sin duda me dejo sorprendida, luego de aquello me marche también y llegue hasta casa, la noche transcurrió normal, al igual que los siguientes días.
Y es que ¿cómo vas a saber que esa sería uno de los momentos más importantes para ustedes?, no hay manera de saberlo, eso solo surge y en el momento no te das cuenta de la relevancia que presentará más adelante.
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Los días pasaron, algunos días de la semana solíamos vernos luego de la práctica, hablábamos sin parar y disfrutábamos de cada momento compartido, cada vez me iba gustando más su forma de ser, lo conoces y te das cuenta que es de esas personas que son únicas, que no son como el resto, que las vibras y el aura que dan son muy diferentes a las de cualquier otra persona, empiezas a querer comparar y vez que no es posible compararle con alguien más, que su forma de ser es extraordinaria y única, que en su cabeza existe un mundo lleno de ideas, de posibilidades de nuevas aventuras.
Y todo ese mundo te encantaría conocerlo, cada vez que lo vez vas deseando conocer más , hasta el más pequeño detalle de lo que lo hace ser él mismo, te vas enamorando de esos detallitos, de su sonrisa y la forma en que sus ojos se cierran al reír, del sonido de su voz, de su léxico incluso, de la forma en que camina, de cómo te abraza, como te besa, de su aroma, de sus ocurrencias, de cómo te hace sentir de bien, de que puede hacer que el mundo desaparezca totalmente haciéndote entrar en una especie de capsula en donde el tiempo se detiene y solamente existen ustedes dos.
Esos detalles aunque te encanten se van convirtiendo también en tu perdición, ya que llega un momento en el que caes a la realidad, y sabes que si llegara a faltarte recordarías hasta lo más mínimo de esa persona, como tomaba una bebida, que comidas no prefiere, que elegiría de vestir, que haría en cierto momento, sentirías su loción y llegarían los recuerdos a tu mente, alguien más diría una frase de él y se volvería a hacer presente.
Y es que resulta imposible conocer a alguien y no recordarlo luego con algo que suceda en tu entorno, poco a poco se va volviendo parte de tu mundo, se va adaptando con lo que ya existía en él hasta que un día ya forma parte de tu vida, tanto que se hace presente en casi todo lo que te rodea.
Un mensaje de "buenos días" hará falta si un día ya no llega, o uno de "buenas noches", que un día ya no haya llamadas o ya no se vean luego del trabajo o escuela, da igual, porque se hará presente de una forma inexplicable, y todo porque no solo le abriste tu corazón, le abriste las puertas de TU mundo, en el que ahora él juega un papel muy importante, ese papel el cual representa la importancia de su presencia en tu día a día, puede que cambie ciertos hábitos o agregue otros, que te dé nuevas experiencias o lo que yo llamo "las primeras veces" de cualquier actividad que hayas o no querido realizar (esas son las más difíciles de olvidar).
Y ahí está, dándole vueltas a tu mundo, haciendo que ambos se adapten a este nuevo personaje que ha logrado entrar.
