Now You See Me / Jack Wilder

La ultima reunion

Esta era la última vez que nos reuniríamos en mi apartamento ya que pronto estaremos en Las Vegas para presentar el show:

Habíamos esperado un año para esto, así que no podíamos echarlo a perder.

Los chicos fueron llegando uno a uno: primero Merritt, después Henley; Jack y por ultimo Danny.

Todos estábamos un poco nerviosos por que llevaríamos a cabo en unos días, así que nos dedicamos más que nada a repasar el plan, checar planos y comer panecillos con chocolate caliente.

Repasamos nuestras líneas y el plan de emergencia en caso de que las cosas se pusieran feas.

Después de platicar sobre eso, pasamos al tema del vestuario y sobre cómo nos vestiríamos para dar el show que pondría nuestro nombre en la cima; quedamos que sería con ropa formal pero cómoda en caso de tener que salir huyendo.

Me despedí de los chicos y de Henley con un abrazo cuando se retiraron.

"No hagan cosas perversas" había dicho Merritt cuando salió de mi casa y cerré la puerta.

Desde que les dijimos a los chicos que estábamos saliendo no paraban de hacer chistes o comentarios al respecto, en especial Merritt.

-Esto es demasiado estresante, mi cuerpo no está hecho para soportar tanto estrés - le dije a Jack y me senté en la barra dejando que Jack se colocara entre mis piernas para poder recargarme sobre su hombro.

-Lo sé, cariño - me acarició el cabello -. Pero piensa en lo que haremos después de esto, piensa positivo.

-Sí, si - levante mi cabeza para mirarle a los ojos -. Es solo que ahora siento mucha presión para que todo salga bien - junté mi cabeza con la suya.

Y era cierto, teníamos demasiada presión sobre nuestros hombros.

-Te propongo algo - me separé de él para dejarlo hablar -. Qué te parece si te das una ducha relajante mientras yo preparo algo rico para cenar - me miró a los ojos con una sonrisa en su rostro.

-Gracias por todo esto, cariño - le di un beso en su frente y me ayudó a bajar de la barra.

-No agradezcas nada, linda - depositó un beso en mi frente -. Ahora ve, tómate tu tiempo y vuelve para la cena, okey? - me abrazó por la cintura.

-Juro que podría abrazarte por siempre - dije pegada a su pecho -. Te quiero muchísimo.

Jack se había vuelto muy importante en mi vida durante este tiempo que llevábamos saliendo.

Él era una parte fundamental, toda nuestra relación se basaba en apoyarnos y tener confianza sin caer en la dependencia.

A pesar de pasar mucho tiempo juntos, sabíamos que éramos personas individuales y que a veces no podíamos reunirnos porque el otro tenía cosas que hacer.

Es algo bonito, sinceramente.

Nunca estuve tan enamorada de alguien como lo estoy de él.

Él era mi mejor amigo: podíamos platicar sobre cualquier tema sin miedo a lo que pensara el otro; podíamos chismear como buenas señoras, además de que ambos podíamos mostrar a nuestro niño interior; pero sobre todo: él era mi lugar seguro.

Después del baño cenamos y platicamos un poco sobre lo que haríamos al día siguiente.

La plática se extendió demasiado y cuando nos dimos cuenta el reloj ya marcaba las 11 de la noche y yo definitivamente no me iba a arriesgar a que mi chico se fuera y le pasara algo; le ofrecí quedarse y él aceptó gustoso.

-Buenas noches, bonita - dijo Jack una vez que entramos en la cama.

-Descansa, cariño - le dije mientras me apoyaba en su pecho.

Mi último pensamiento fue sobre lo bien que olía mi chico con ese perfume.